Entre llantos desgarradores y muestras de afecto, se le dio cristiana sepultura al cuerpo de Angeliz Carrasquillo Rosa, la joven embarazada asesinada a tiros el pasado viernes en Caguas.

Amigos y familiares de la joven, natural del barrio Cañaboncito de ese municipio, llegaron poco después de las 2:00 p.m. hasta el cementerio Borinquen Memorial II para darle el último adios a la joven estudiante de psicología.

"Angeliz, siempre te recordaremos como un ángel con todo el mundo. Tenías nobleza y a la hora de ayudar siempre estabas dispuesta", dijo Shirley Quintero, hermana mayor de la joven mientras ofrecía su discurso de despedida.

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"Ahora eres nuestro ángel de la guarda para nosotros y para tu bebé, que lo llamaremos como tu querías, Demian Chael", añadió con la voz entrecortada.

A eso de las 3:00 p.m. el féretro color rosa donde yacían los restos de la joven fue llevado hasta la fosa. Mientras, familiares cercanos y amigas de la joven gritaban con desesperación o perdían el conocimiento por la fuerte impresión.