Los restos del piloto puertorriqueño Rigoberto López, quien falleciera el pasado 29 de octubre tras sufrir un accidente aéreo en la isla de San Martín, arribaron a las 10:37 de la mañana de hoy a suelo boricua.

Tras la llegada, dos  camiones lanzaron chorros de agua sobre la  nave de la línea aérea American Airlines donde venían los restos, ceremonia que se acostumbre a hacer cuando se retiran los pilotos.

Fue en ese momento que los sentimientos se apoderaron de los familiares del joven piloto, quienes fueron llevados hasta al área de la pista para presenciar el momento. Allí estuvieron sus padres, Rigoberto López y Diana Colón,  así como su hermano, novia y otros familiares. 

"Ha sido bien duro este proceso desde que ocurrió el accidente. El año pasado había pasado las navidades con él. ..y este año todo eso lo tuvimos que pasar sin él...y toda esta espera tan dura", expresó el progenitor Rigoberto López.

"Quiero darle las gracias al pueblo de Puerto Rico que se desbordó en oraciones hacia nosotros", expresó su padre.

También estuvo presente el secretario de Estado David Bernier y el director de la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres, Miguel Ríos, así como el personal que trabajó en la recuperación de los restos, con quienes la familia intercambió palabras y abrazos.

López falleció en la tarde del 29 de octubre, mientras se encontraba copilotando una avioneta de carga, junto al alemán Eric Schnell, y la nave cayó a dos o tres millas de la costa de San Martín.

El cadáver de Schnell fue encontrado la misma noche del accidente, entre la bahía Mullet y la playa Cupecoy. Mientras que de López no se tuvo rastro hasta que personal de Aemead se trasladó al área. Fue encontrado el 10 de noviembre.