Calles desiertas debido a la cuarentena, escáneres térmicos en los aeropuertos, personal de salud ataviado en batas blancas y fumigando extensas zonas de la ciudad. Todas las medidas preventivas parecen pocas para combatir al coronavirus de Wuhan en China, incluso utilizar robots para limitar el contacto entre humanos.

Si bien la mayor cantidad de infectados se han registrado en Wuhan, capital de Hubei, el virus ha logrado expandirse a lo largo del gigante asiático registrando un total de 7,700 infectados y 170 muertos.

Entre las ciudades que ya reportaron casos confirmados de coronavirus se encuentra Hangzhou, capital de la provincia de Zhejiang.

La lista de infectados -o posibles- figuran un grupo de 200 viajeros que tuvieron que ser puestos en cuarentena al interior de un hotel de la ciudad.

Es entonces cuando hace su aparición Little Peanut, un robot desarrollado por la empresa Keenon Robotics que se encarga de llevar comida para las personas bajo observación.

La pequeña máquina transita por los pasillos del hotel cargando bandejas de comida y avisando sobre su llegada, para de esa forma evitar que los pacientes observados entren en contacto con otras personas.

“La tecnología de multisensores, basada en LIDAR (siglas en inglés para el sistema de detección y rango de luz), visión artificial, sensor de profundidad, etc., tiene la capacidad de ubicar y navegar alto con precisión en interiores”, indica en su página web la empresa Keenon. “Peanut puede funcionar de manera suave y estable en interiores, incluso en entornos complejos”.

La compañía también detalla que Peanut cuenta con un desarrollado sistema de Inteligencia Artificial que le permite “transmitir diferentes emociones humanas” a través de expresiones en la pantalla que simula los ojos del robot, “haciendo la comunicación más interesante”.

El robot tiene capacidad para cargar hasta 22.05 libras en cada bandeja y puede funcionar durante unas 10 horas, aproximadamente.

Se espera que la cuarentena en ese hotel se levante en dos semanas.