El 70 % de los arrecifes de coral en Florida, que forman la tercera barrera coralina más grande del mundo, se están erosionando, según un nuevo estudio científico.

“La evaluación espacial más grande hasta la fecha subraya la necesidad de mejorar las prácticas de gestión y los esfuerzos de restauración de los arrecifes de coral en Florida”, afirmó la Escuela Rosentiel de Ciencia Atmosférica, Marina y Terrestre de la Universidad de Miami (UM), en un comunicado.

La investigación fue realizada en ese centro académico por un grupo interdisciplinario de científicos a través del Instituto Cooperativo de Estudios Marinos y Atmosféricos de la Administración Nacional de la Atmósfera y los Océanos de EE.UU. (NOAA).

El autor principal del estudio, John Morris, investigador del Laboratorio Oceanográfico y Meteorológico del Atlántico de la NOAA, subrayó que sus resultados van a servir de ayuda para comprender mejor qué partes de la barrera coralina de Florida son vulnerables a la pérdida de hábitat y requieren gestión y restauración.

La barrera tiene una extensión de 350 millas (563 kilómetros) desde St. Lucie, en la costa este de Florida, hasta Dry Tortugas, en los Cayos de Florida (cerca de Cuba).

Los investigadores analizaron el conjunto de todos los organismos vivos que habitan en el fondo del mar y datos de peces loro de 723 sitios de arrecifes en tres áreas de la barrera de corales de Florida.

Se trataba de calcular el nivel de carbonato en cada uno de esos sitios. Un alto nivel de carbonato indica crecimiento, mientras que si es bajo significa que el arrecife está perdiendo estructura.

Los científicos descubrieron que en 506 de los sitios estudiados el arrecife estaba perdiendo hábitat.

“Estos hallazgos subrayan la necesidad de mejorar las estrategias de gestión, como la plantación de corales para ayudar a restaurar la estructura de coral que se ha perdido”, dijo la coautora del estudio, Erica Towle, coordinadora del Programa Nacional de Monitoreo de Arrecifes de Coral de la NOAA y ex alumna de la Escuela Rosenstiel de la UM.

“En el futuro, podemos usar esto como punto de referencia para implementar y rastrear el éxito de las estrategias de gestión”, dijo.

En la última década los arrecifes de coral de Florida han sufrido, además del daño causado por embarcaciones, blanqueamiento y enfermedades, como la descubierta en 2014 en aguas de la Bahía de Vizcaya, en Miami, que petrifica los tejidos de ciertos tipos de coral y se ha extendido por el Caribe.

Según la NOAA, los arrecifes de coral de Florida sustentan 70.000 puestos de trabajo y generan alrededor de 8.500 millones de dólares en ventas e ingresos anualmente.

Unos arrecifes saludables sirven de protección a las costas ante inundaciones y marejadas ciclónicas.

“A menos que se implementen estrategias de gestión, la erosión de los arrecifes de Florida probablemente reducirá el grado en que los arrecifes de coral pueden sustentar estos importantes servicios económicos y ecosistémicos”, dijo Morris.

El estudio, titulado “La baja acumulación de carbonato neto caracteriza el arrecife de coral de Florida”, se publicó en la revista Scientific Reports.