Miami. Un agente policial de Orlando (Florida) que sufrió estrés postraumático después de haberse encargado de recoger los cadáveres de la matanza en el club Pulse en 2016, demandó hoy al Departamento de Policía de la ciudad por acoso y ambiente de trabajo inseguro, informaron hoy medios locales.

El demandante, Gerry Realin, que desde julio cuenta con una baja por incapacidad permanente debido a estrés postraumático, afirma que cuando el 12 de junio de 2016 un estadounidense de origen afgano, Omar Mateen, mató a 49 personas en el club gay Pulse tuvo que trabajar 16 horas fuera y cinco dentro del local sin descanso.

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Según el canal 2 de Orlando, Realin denuncia en su demanda que el Departamento de Policía ignoró "regulaciones que establecen que el trabajo sea realizado de una manera segura y saludable".

El demandante dice que al equipo encargado de retirar los cadáveres dentro del club no se le dio la ropa adecuada para esa tarea y que además no tenían protección ocular, agregó ese medio.

Realin afirma además que siete de sus superiores, incluido el jefe de la Policía de Orlando, John Mina, "le acosaron, intimidaron y amenazaron de manera reiterada".

También acusa al vicejefe de la Policía, Orlando Rolon, de haberle confrontado cuando coincidieron en una gasolinera.

De acuerdo con el demandante, Rolon le dijo que ya era hora de que superara lo de Pulse, lo que le causó una crisis de llanto delante de sus hijos.

Realin no es el único policía con estrés postraumático después de la matanza perpetrada por Mateen, quien murió por disparos de las fuerzas de seguridad dentro del club.

Delgado, de la policía de Eationville, localidad cercana a Orlando, también sufrió estrés postraumático y solo pudo regresar al trabajo hace ocho meses, aunque solo para hacer trabajo de escritorio y administrativo.

La decisión ha generado malestar y solidaridad con Delgado. El cofundador de Pulse Ron Legler ha calificado de "injusticia" el trato dado a Delgado, que puso a salvo de los disparos de Mateen a personas que estaban en Pulse, ha contribuido a una campaña en GoFundMe para ayudar económicamente al policía.

Hasta la matanza perpetrada el 1 de octubre en Las Vegas por Stephen Paddock, quien disparó desde un hotel a los asistentes a un concierto al aire libre y mató a 59 personas, Pulse era la peor masacre cometida por un individuo con armas de fuego en Estados Unidos.