La ciudad de Nueva York canceló tres emblemáticos desfiles de verano debido al impacto del coronavirus.

El Desfile de Orgullo Puertorriqueño, el Desfile de Apoyo a Israel y el Desfile de Orgullo Gay _que cumpliría su 50to aniversario_ no se realizarán este año, anunció el lunes el alcalde Bill de Blasio.

Son medidas dolorosas pero necesarias para acatar las normas de distanciamiento social y combatir el contagio de la enfermedad, afirmó De Blasio.

“Volveremos a celebrar estos desfiles algún día, y encontraremos la manera adecuada de hacerlo”, prometió el alcalde.

El Desfile de Orgullo Gay comenzó en 1970 para conmemorar el incidente del año anterior que los usuarios de un bar gay neoyorquino resistieron una batida de la policía local.

Los desfiles para Puerto Rico e Israel son emblemáticos de la ciudad que tiene la mayor población judía fuera de Israel, y la mayor población puertorriqueña fuera de la isla.

Entretanto, el alcalde De Blasio advirtió que sería necesario que cientos de miles de habitantes de la ciudad tendrían que ser sometidos a la prueba del virus a diario antes de que él pueda levantar las medidas de confinamiento social.

“Para poder regresar a la normalidad tendríamos que tener quizás, en nuestra ciudad, cientos de miles de pruebas diarias”, expresó el alcalde en el programa “Morning Joe” del canal MSNBC.

“Habrá que tomar la temperatura a todos al entrar a su sitio de trabajo, habrá que tener todo tipo de medida para asegurarnos de que quien esté enfermo sea inmediatamente aislado”, agregó.

Sin embargo, advirtió que la ciudad no podrá reanudar su actividad económica hasta que no haya pruebas generalizadas “y hasta ahora el gobierno federal no ha podido hacerlo”.

La cantidad de nuevos casos en la ciudad de Nueva York parece haberse nivelado. La cantidad fue de 507 el sábado, un descenso de 271 desde el lunes anterior. De Blasio atribuyó a la mejoría “a la gente común de Estados Unidos, a la gente común de Nueva York, que ha estado tratando de hallar una nueva forma de vivir”.

Las muertes por el coronavirus en Estados Unidos, por mucho el país más afectado, era el lunes de más de 40.000 con más de 750.000 infecciones confirmadas, según el conteo de la Universidad Johns Hopkins. Es muy probable que la cifra verdadera sea mucho más alta, debido a que las infecciones leves a veces no son incluidas, las pruebas han sido limitadas y debido a problemas contando los muertos en la crisis.

En la mayoría de la gente, el nuevo coronavirus provoca síntomas leves o moderados que desaparecen en dos a tres semanas. En algunas personas, sobre todos los adultos mayores y las que padecen trastornos de salud subyacentes, puede provocar enfermedades más graves, como la neumonía, e incluso la muerte.