Miami. La Comisión de Conservación de Vida Silvestre y Pesca de Florida (FWC) aprobó prohibir gradualmente la venta y posesión de 16 tipos de reptiles, como iguanas verdes y lagartos tegus, considerados especies invasoras que amenazan la flora y fauna autóctona.

La medida más dura, de acuerdo con el Miami Herald, fue la prohibición total de la cría comercial de tegus e iguanas en el “estado del sol”, aunque no entrará en vigor hasta junio de 2024 por la objeción de comerciantes y propietarios de reptiles exóticos que temen daños a su industria.

También, según el voto por unanimidad de FWC emitido ayer, los dueños de mascotas tienen hasta 180 días para cumplir con las nuevas regulaciones que exigen recintos de hormigón para reptiles al aire libre.

Las nuevas reglas incluyen a tegus e iguanas verdes en la misma categoría que las pitones birmanas y los lagartos del Nilo, cuya venta como mascotas e importación fue prohibida anteriormente.

Las pitones birmanas se han adueñado de la mayor reserva natural de Florida, el humedal de los Everglades, donde están diezmando a la fauna autóctona, por lo que el estado les ha declarado una guerra sin cuartel.

El comisionado Robert Spottswood afirmó en la reunión que el “alto riesgo” de daño ambiental y ecológico de las especies invasoras que se liberan o se sueltan en la naturaleza supera las dificultades “impuestas tanto a la comunidad empresarial como a los entusiastas”.

“Estos animales están haciendo mucho daño. Depende de nosotros abordarlo y hacer algo. Puede que esto no sea perfecto, pero es lo mejor que he visto hasta ahora”, sostuvo el funcionario.

Otro de los miembros de la Comisión de Conservación, Rodney Barreto, advirtió que “esto está causando estragos en Florida. La gente se muda a Florida, ¿por qué? Se mudan aquí por nuestro medio ambiente, nuestras playas, nuestros lagos”, destacó.

Las pitones birmanas se han adueñado de la mayor reserva natural de Florida, el humedal de los Everglades, donde están diezmando a la fauna autóctona, por lo que el estado les ha declarado una guerra sin cuartel.
Las pitones birmanas se han adueñado de la mayor reserva natural de Florida, el humedal de los Everglades, donde están diezmando a la fauna autóctona, por lo que el estado les ha declarado una guerra sin cuartel. (Robert F. Bukaty)

Muchas de las nuevas medidas aprobadas que repercutirán en los criadores y vendedores de reptiles invasores de este ecosistema se introducirán gradualmente en los próximos meses para dar tiempo a las empresas a cumplirlas.

Las iguanas verdes (Iguana iguana), naturales de Centroamérica y Suramérica, han encontrado el paraíso en el sur de Florida, donde han proliferado tanto que en 2019 la FWC dio al ciudadano común licencia para matarlas. El tegu, un tipo de lagarto que proviene de las mismas áreas que las iguanas verdes, también está acomodado en el sur de Florida.

Según la web de FWC, las iguanas verdes pueden causar daños considerables a la infraestructura, incluidos los malecones y las aceras. Los machos pueden crecer hasta cinco pies de largo y pesar hasta 17 libras.

“Esta especie no está protegida en Florida, excepto por la ley contra la crueldad”, detalla el organismo estatal.

En julio de 2019, la FWC difundió un comunicado en el que alentaba a los ciudadanos “a matar iguanas verdes en su propiedades siempre que sea posible”, pero de manera rápida y causando el menor “sufrimiento” al animal.