Tras la llegada de la tormenta tropical Marco, la costa estadounidense del Golfo de México centró su atención en Laura, otro sistema que le sigue y que podría convertirse en un huracán de categoría 3 con vientos de más de 115 millas por hora y marejadas ciclónicas que podrían anegar pueblos enteros.

Laura, que se convirtió en huracán categoría 1 a las 8:00 de la mañana del martes, azotó el sur de Cuba luego de causar al menos 11 muertos en República Dominicana y Haití, donde provocó cortes de electricidad e inundaciones en los países que comparten la isla La Española. Entre los fallecidos había una niña de 10 años sobre cuya casa fue golpeada por un árbol y una madre y su hijo pequeño, que fueron aplastados por un muro que se vino abajo.

Laura se ubicaba a 128 kilómetros (unas 81 millas) al noreste del extremo occidental de Cuba y a 1.231 kms (765 millas) del sureste de Lake Charles, en Louisiana. El meteoro se movía en dirección oeste-noroeste a 32 km/h (20 mph) con vientos máximos sostenidos de 75 mph.

El centro de Laura se alejaba de Cuba y pasaría sobre la parte suroriental de Golfo de México durante la noche. Según la previsión, se moverá sobre el centro y el noroeste del golfo el martes en la noche y el miércoles, y se acercará a la costa noroeste el miércoles en la noche.