El Ayudante General de Puerto Rico, el General de División José J. Reyes, anunció su retiro, no sin antes repasar las situaciones que enfrentó en los pasados cuatro años y agradeciendo la labor y el apoyo de los miembros de la Guardia Nacional.

“El 19 de febrero de 2019 fui confirmado en el Senado de Puerto Rico para liderar a los hombres y mujeres de esta organización, y con la encomienda de elevarla a un nivel más alto de aceptación, respeto y orgullo en la conciencia de cada uno de sus miembros, de nuestro pueblo y de la Nación. Hicimos frente a unos retos sin precedente en la historia moderna de nuestra Isla que, en algunos momentos, incluso, llegaron a perturbar los cimientos de nuestra sociedad. Pero en medio de toda esta confusión siempre estuvieron presentes los hombres y mujeres de la Guardia Nacional como columna firme y faro de esperanza”, expresó Reyes en su mensaje.

Explicó que “mientras nuestro pueblo aún se recuperaba de las experiencias devastadoras de los huracanes Irma y María de 2017, juntos afrontamos los retos que trajo consigo el 2020 -los fuegos forestales, los continuos disturbios atmosféricos, los terremotos que nos impactaron por primera vez en casi 100 años y, como si fuera poco, la pandemia del COVID-19. Con temor a lo desconocido, los hombres y mujeres de la Guardia Nacional de Puerto Rico se levantaron firmes a combatir ese azote, protegiendo así no solo a sus familias sino a todo el pueblo de Puerto Rico hasta que pudimos declarar victoria, convirtiéndonos en la región con el mayor porcentaje de vacunados en toda la Nación”.

“Hemos cumplido cabal y exitosamente todas nuestras responsabilidades para con nuestro pueblo puertorriqueño, así como nuestra responsabilidad federal, mostrando una entrega total al servicio desinteresado y al cumplimiento del compromiso adquirido”, aseguró.

En su mensaje continúa diciendo: “Puedo decir con orgullo que por los pasados cuatro años las acciones y los logros de nuestra Guardia Nacional sobrepasaron, por mucho, cualquier expectativa. Tomamos los retos y los convertimos en oportunidades. Cumplimos con nuestro cometido, mantuvimos nuestra promesa y permanecimos ¡Siempre Presente!

De mi parte, servir a Puerto Rico durante los tiempos más difíciles ha sido la misión más increíble y desafiante de mis 38 años en el servicio militar, pero a la vez han sido los más gratificantes, porque pude servir a mi gente – al pueblo de Puerto Rico.

Hoy anuncio mi retiro y deseo agradecer la oportunidad que se me brindó de ser el Ayudante General de Puerto Rico y participar junto a estos extraordinarios hombres y mujeres en el desarrollo de un mejor futuro.

La Guardia Nacional ha demostrado que hay esperanza para nuestro pueblo aún en los momentos más difíciles y que, mientras tengamos hombres y mujeres de la calidad moral y el sentido de compromiso demostrado por sus Ciudadanos-Soldados y Aviadores, nuestra organización estará siempre al servicio de Puerto Rico.

¡Gracias a todos! Dios bendiga a nuestra Isla, Dios bendiga a la Nación y Dios bendiga a la Guardia Nacional de Puerto Rico”.