Bajo un sol inclemente, cientos de unionados de más de 20 grupos obreros se han movilizado al Capitolio en repudio al proyecto 938, que les quitaría beneficios adquiridos a través de convenios colectivos y, según alegan,  provocaría el despido de más de 45 mil empleados públicos. 

Armados con gorras, sombrillas y pañuelos trataban de resguardarse mientras gritaban consignas.  En un momento decidieron moverse a las escalinatas, propiciando la aparición de la fuerza de choque de la Policía, a la cual abuchearon.

Un unionado gritaba insultos e invitaba a sus compañeros a entrar a la fuerza en la Casa de las Leyes. Los agentes se veían tensos, pero no hubo incidentes. 

Otro grupo se movilizó al lateral del edificio y a golpes de puerta exigían entrar. Del otro lado, los policías protegían el acceso. 

Javier López, líder obrero, llamó a la calma y el grupo se dispersó. 

Sé espera que la manifestación dure horas en lo que se debate el proyecto en la Cámara. 

.

Juan, uno de los unionados de la Hiepaaa, explicó que “lo que esamos sufriendo es porque somos una posesión del Congreso y la Junta es una imposición. ¿Cómo vamos a aceptar que una persona como Jaresko se gane $52 mil mensuales? Si no hay chavos, no hay chavos para ella tampoco”, reclamó.

Javier López López, secretario de organizaciones de la Central Puertorriqueña de Trabajadores, “vemos que la intención y el pulseo de La Fortaleza es la aprobación de este proyecto y escuchamos al secretario del Trabajo decir que si a este proyecto le cambian un punto o una coma hay que despedir a 45 mil empleados públicos”, denunció. “Entendemos que es un chantaje a este país; venimos de una Ley 7 donde botaron a 30 mil empleados y no resolvieron la crisis”.

“Estamos exigiendo el retiro del proyecto y que aprueben legislación que imponga impuestos a las foráneas de este país, que son las que se han llevado todos los chavos. Sin embargo, vemos cómo la Legislatura atenta una vez más contra los trabajadores y el servidor público”, reclamó López.

Pedro Irene Maymí, presidente de la Unión Independiente Auténtica y la Central Puertorriqueña de Trabajadores, señaló que el proyecto 938 “no solo les quita beneficios a los trabajadores, sino que menoscaba 100 años de lucha y negociación colectiva en Puerto Rico. Nos parece que es una mezquindad que se atente contra la negociación colectiva más allá de la eliminación de beneficios”.

Según el líder obrero, el proyecto no tiene los votos “y esperamos que los legisladores que tienen conciencia le voten en contra”.

Alexis Cancel, presidente de Tuama, dijo por su parte que “estamos aquí en solidaridad y nos quedamos desprovistos de un convenio colectivo. Además usan un chantaje para despedir a los empleados, pero despedir 45 mil representa un billón de dólares, y no me cuadra que busquen $130 millones con un billón”, analizó. “Con un billón le pagamos a los bonistas y cerramos el déficit del presupuesto en positivo”.

Sin adelantar qué otras medidas de presión puedan ejercer como unión, sí agregó que se unirán al Paro Nacional y “si los trabajadores están en la calle, no hay guaguas”.