Casi 300 niños secuestrados de una escuela en el estado de Kaduna, en el noroeste de Nigeria, han sido liberados más de dos semanas después de que fueran sacados de su escuela y llevados al bosque, según dijo el domingo el gobernador del estado.

Al menos 1,400 alumnos han sido secuestrados de escuelas nigerianas desde 2014, cuando milicianos de Boko Haram capturaron a cientos de niñas en el poblado Chibok del estado de Borno en 2014. En los últimos años, los secuestros se han concentrado en las regiones centrales y nororientales del país, donde docenas de grupos armados atacan con frecuencia a aldeanos y viajeros para pedir rescates.

El gobernador, Uba Sani, no dio detalles sobre la liberación de los 287 alumnos secuestrados el 7 de marzo en su escuela en la remota localidad de Kuriga. Al menos 100 de ellos tenían 12 años o menos. En un comunicado dio las gracias al presidente de Nigeria, Bola Tinubu, por “asegurarse especialmente de que los alumnos secuestrados de la escuela de Kuriga son liberados ilesos”.

Tinubu había prometido rescatar a los niños “sin pagar un centavo” como rescate. Pero es habitual pagar rescates, a menudo organizados por familias, y es raro que las autoridades nigerianas reconozcan los pagos.

Ningún grupo ha reclamado la autoría del secuestro en Kaduna, que la población local atribuyó a grupos de delincuentes conocidos por realizar asesinatos masivos y secuestros para reclamar dinero en la región norteña, marcada por el conflicto. La mayoría son antiguos pastores que tenían conflictos con las comunidades establecidas en la zona.

Al menos dos personas con amplios conocimientos de la crisis de seguridad en el noroeste de Nigeria dijeron a The Associated Press que se conocía la identidad de los captores.

Murtala Ahmed Rufa’i, profesor de estudios sobre paz y conflicto en la Universidad Usmanu Danfodiyo, y el jeque Ahmad Gumi, un clérigo que ha negociado con los delincuentes, dijeron que se esconden en los extensos y anárquicos bosques de la zona.

Es raro que se produzcan detenciones tras los secuestros masivos en Nigeria, ya que por lo general las víctimas son liberadas sólo después de que las familias desesperadas paguen rescates o a través de acuerdos con funcionarios.

El gobernador de Karuna dio las gracias a las fuerzas de seguridad y las autoridades por la liberación de los alumnos. “Pasé noches en vela con el asesor de seguridad nacional, Mal. Nuhu Ribadu (...) definiendo estrategias y coordinando las operaciones de las agencias de seguridad, que finalmente llevaron a este resultado exitoso”, dijo.