Londres. El Reino Unido comunicó este lunes 288 nuevas muertes por COVID-19, la menor cifra diaria desde finales de marzo, hasta un total de 28,734 fallecidos desde que comenzó la pandemia.

A pesar de ese descenso, el ministro de Salud, Matt Hancock, advirtió de que las víctimas mortales suelen ser más tras los fines de semana, por lo que espera que el número vuelva a repuntar en los próximos días.

En 24 horas se han llevado a cabo 85,186 test de COVID-19, si bien Hancock asegura que el país tiene la capacidad para realizar 108,000 diarios, y se han detectado 3,985 nuevos contagios en la última jornada.

Relacionadas

El ministro recalcó que las medidas de distancia social deben mantenerse en el Reino Unido por ahora, hasta que diversos indicadores sobre la expansión del virus continúen mejorando.

El próximo jueves, el Gobierno debe evaluar una extensión de las medidas que ordenó el pasado 23 de marzo y se espera que el primer ministro, Boris Johnson, desvele el domingo su hoja de ruta gradual para comenzar a desescalar el confinamiento, según han avanzado diversos medios.

El ministro de Salud informó hoy de que ha comenzado un programa piloto en la isla de Wight (sur de Inglaterra) para probar la aplicación móvil que permitirá rastrear contagios una vez comience a relajarse el aislamiento de la población.

Los empleados del sistema de salud de la isla podrán comenzar a descargarse el software mañana, mientras que los cerca de 140,000 habitantes de ese territorio podrán comenzar a hacerlo a finales de semana.

El programa detectará la distancia entre el usuario y otros teléfonos a través del protocolo inalámbrico Bluetooth y advertirá a quienes hayan estado en contacto cercano con personas que más tarde desarrollen síntomas o den positivo por COVID-19.

Al mismo tiempo, el Gobierno británico ha comenzado a formar a un equipo que alcanzará las 18,000 personas, que se encargará de contactar con quienes tengan la enfermedad y entrevistarles para determinar la cadena de contagios y proteger a quienes hayan estado cerca de ellos.

El Ejecutivo británico anunció hoy asimismo que el hospital de campaña que se abrió en el centro de convenciones de Londres ExCel a principios de abril va a “poner en pausa” su actividad la próxima semana al haberse reducido el número de hospitalizaciones.