Londres. Amantes de los misterios se congregaron el sábado en Escocia para buscar señales del mítico Monstruo del Lago Ness.

El Centro Loch Ness dijo que se buscarán pruebas de la existencia de Nessie mediante imágenes térmicas tomadas por drones, cámaras infrarrojas y un hidrófono para detectar sonidos bajo las aguas turbias del lago. El evento de dos días se presenta como el estudio más grande del lago en 50 años, e incluye a gente en todo el mundo que observa las aguas de manera remota con webcams.

Alan McKenna, del Centro Loch Ness, dijo que se trata de “inspirar a una nueva generación de entusiastas del lago Ness”.

McKenna dijo a la radio BBC que “se buscan ondas en la superficie y se pide a los voluntarios que registren toda conducta natural en el loch”.

“No toda ondulación u ola es una bestia. Algunas tienen explicación, pero hay un puñado que no la tienen”, añadió.

El Centro Loch Ness tiene su sede en el antiguo Hotel Drumnadrochit, donde nació la leyenda. En 1933, el gerente Aldie Mackay dijo haber visto una “bestia acuática” en el loch rodeado de montañas, el lago de agua dulce más grande del Reino Unido en cuanto a volumen y uno de los más profundos, con 230 metros (750 pies).

La historia generó una fascinación mundial con el monstruo esquivo, con engaños y cientos de versiones de testigos oculares. Entre las numerosas teorías están la de un reptil marino prehistórico, una anguila gigante, un esturión e incluso un elefante que huyó de un circo.

Muchos creen que los avistamientos son falsos o bien se trata de troncos de árboles que flotan o de aguas agitadas por los fuertes vientos, pero la leyenda es una bendición para el turismo en la pintoresca región de las Highlands de Escocia.