Por múltiples secuestros, varios robos de auto a mano armada y un asesinato, los dos hombres imputados de haber secuestrado en el 2018 al reguetonero Bryan Rohena Pérez, mejor conocido por Bryant Myers, pasarán toda su vida en prisión.

Uno de los convictos es un joven de 25 años y que lleva en prisión desde los 20, según salió a relucir durante su vista de sentencia en el Tribunal Federal de Distrito para Puerto Rico, en el Viejo San Juan. Se trata de Jairo Huertas Mercado, quien fue sentenciado este viernes por el juez federal Francisco Besosa a tres cadenas perpetuas para cumplirlas consecutivamente, así como 540 meses en prisión.

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Al joven se le imputó seis robos de auto a mano armada y dos asesinatos. Solo resultó convicto en una de las muertes.

El otro convicto lo es Erik Pizarro Mercado, de 30 años. Este fue sentenciado a cumplir dos cadenas perpetuas de manera concurrente y 456 meses en prisión. A este se le imputaron cinco robos de autos a mano armada y un asesinato.

Ambos convictos eran residentes de Loíza y también resultaron convictos por varios secuestros. Serían trasladados a cárceles en Florida para cumplir su pena.

El juez Besosa hizo constar que los convictos se dedicaban a “usar la fuerza, impartir terror y pánico” durante la comisión de los delitos.

El secuestro más notable que se le achacó al dúo, que se besó en la mejilla una vez llegaron a la sala del juez Besosa, fue el de Bryant Meyers.

Según la acusación, para el 4 de junio de 2018 los convictos andaban en un auto robado Toyota Camry. Entonces, cometieron este día un robo a mano armada de un Kia Sportage del 2016 a una fémina que acababa de llegar de su iglesia en Canóvanas. Un día después, los individuos utilizaron este auto hurtado y otros dos más para robar y secuestrar al reguetonero Bryant Myers, así como a su madre.

La Fiscalía federal alegó que Huertas Mercado le tenía rencor al reguetonero por haber mencionado en una de sus canciones la muerte de su primo, Corroro.

Según el récord de Primera Hora, el secuestro ocurrió a eso de las 6:56 p.m. del 5 de junio de 2018, mientras el cantante se encontraba conversando con varios jóvenes frente a la cancha que ubica al lado de la residencia de su progenitora, María Pérez, en la urbanización Loma Alta en Carolina. Hasta allí, llegaron cuatro individuos en una guagua marca Kia Sportage, dos armados con rifles y los otros con pistolas. Uno de ellos hizo un disparo y lo aguantó por la cabeza para obligarlo a abordar el vehículo y le pidieron las llaves de su guagua marca BMW.

Cuando su progenitora se percató de lo que estaba ocurriendo, les exigió a los delincuentes que también se la llevaran a ella y uno de los secuestradores se la llevó en el vehículo de su hijo.

Un ciudadano fue el que dio la voz de alerta a los policías municipales, que de inmediato iniciaron la persecución de los dos vehículos hasta el área del vertedero de Carolina en la carretera PR-874 donde las patrullas le bloquean el paso.

En el lugar surgió un intercambio de disparos y los ocupantes de la guagua blanca mientras intentaban escapar impactaron en retroceso una de las patrullas, en ese momento Bryant Myers abrió la puerta y se lanzó al pavimento sufriendo laceraciones en las rodillas.