Un boxeador aficionado de 20 años fue sentenciado hoy jueves a 10 años de cárcel y 15 años adicionales de libertad supervisada, por cargos relacionados a sostener relaciones sexuales con una menor, con quien tuvo una hija.

"La sentencia de 120 meses (10 años) reconoce la seriedad de la acusación", dijo el juez Francisco Besosa.

Como parte de un acuerdo de alegación de culpabilidad, Víctor "Vitito" Vega Rodríguez se declaró culpable en marzo pasado de transportar a una menor de 14 años de su escuela hasta su casa en Arroyo, con la intención de incurrir en actos sexuales.

La acusación original era por seis cargos, incluyendo uno de pornografía infantil, y se hablaba de dos víctimas. Asimismo, el arresto se produjo mientras un agente del Negociado de Inmigración y Aduana (ICE) se hizo pasar por una tercera menor de edad.

"Estoy muy arrepentido. Le pido perdón a mi padre, mi hija, mi novia y nada, seguir pa'lante con mis estudios", expresó Vega Rodríguez durante su alocución ante el juez.

La "novia" a la que se refiere fue una de las víctimas en la acusación federal, según dijo el juez federal.

Según las autoridades, el exboxeador aficionado contactó a la joven a través de la red social Facebook y sostuvo una relación con ella, sabiendo que tenía 14 años. A raíz de la relación la chica quedó embarazada y tuvo una hija.

La sentencia impuesta por el juez a Vega Rodríguez es menor a la recomendada en el informe presentencia de Vega Rodríguez -que pedía entre 17 a 21 años de cárcel- pero fue la condena recomendada en el acuerdo de culpabilidad entre la Fiscalía y la defensa.

"Este ha sido un caso muy difícil para mí", dijo el abogado Héctor Ramos Vega, de la Oficina del Defensor Público federal. "Puedes resumir la vida de Víctor en que no tenía a nadie que cuidara de él", expresó.

El abogado Ramos Vega hizo una enumeración de "atenuantes" para que el juez aceptara la condena recomendada ya que describió a su cliente como una persona con capacidad mental de 11 años y que fue abusado por un padre alcohólico. Además, según el defensor, el acusado atestiguó diversos episodios de violencia doméstica en su niñez por parte de su progenitor en contra de su madre, que el Departamento de Familia intervino varias veces en su hogar, que ha sido hospitalizado en diferentes ocasiones y que ha intentado suicidarse en repetidas ocasiones, incluyendo varias veces en el Centro Metropolitano de Detención de Guaynabo.

En su turno ante el juez, el fiscal federal Máx Pérez no se opuso al pedido de la defensa.

Entre las condiciones de la libertad supervisada de 15 años a Vega Rodríguez, que se cumplirá después de la condena de cárcel, el convicto tendrá que recibir tratamiento para ofensores sexuales, tendrá que someterse a pruebas aleatorias de drogas y no podrá tener acceso a Internet en computadoras o en un celular, salvo autorización previa de la oficina de probatoria federal.