Desde que James Harden aterrizó en Houston para la temporada 2012-13, su promedio de puntos anotados por juego ha ido en ascenso. Pero el aumento más significativo ha ocurrido durante los pasados tres años.

Al concluir la fase regular en el 2018, Harden terminó como el líder de la NBA con 30.4 puntos por partido y en la campaña pasada volvió a ganar el título de anotaciones, con 36.1 tantos por juego. Esta temporada, nuevamente encabeza la liga al son de 39.3 tantos en 26 partidos. Si mantiene dicho nivel de productividad, el escolta de los Rockets se convertiría en el primero en acariciar los 40 puntos por juego desde que Wilt Chamberlain tuvo una media de 44.8 puntos en el  1962-63.

¿Podrá Harden sostener ese ritmo? Si logra esquivar alguna lesión severa que lo mantenga fuera de la alineación por un periodo prolongado, no existen razones válidas para pensar lo contrario a pesar de que Harden ahora cuenta con la ayuda de Russell Westbrook, quien también demanda una sustancial cantidad de tiros al canasto. Westbrook ha sido dos veces campeón anotador  en la NBA y en esta campaña promedia 22.5 puntos por encuentro.   

“Entiendo que puede. El ritmo de juego en la NBA es muy rápido, de muchas posesiones, unas 20 más por juego en comparación con el 2005 y eso permite hacer esas estadísticas”, explicó Carlos González, dirigente de los campeones Santeros de Aguada en el Baloncesto Superior Nacional (BSN). 

Giannis Antetokounmpo y Luka Doncic  siguen a Harden en puntos por juego promediando 31.0 y 29.3, respectivamente.    

“Las estadísticas las vamos a ver muy elevadas. Tener juegos en que los equipos suman 130 puntos es algo normal. En estos tiempos, la NBA lo que desea es llamar más la atención y que sea más divertido”, sostuvo González. “Ha bajado la calidad de la defensa y la disciplina ofensiva de los equipos. Las reglas favorecen a jugadores como Harden”.

Asimismo, González destacó el sistema del dirigente Mike D’Antoni para sacarle provecho a las capacidades de Harden, quien también lidera la liga en canastos de tres puntos con 131.   

“Es el equipo de Harden y el juego corre a través de él. Ahora mismo es el mejor jugador ofensivo en la NBA porque coge faltas para ir a la línea de tiro libre. Hay que darle crédito al dirigente, porque aunque a muchos no le gusta, ha sido muy eficiente”. 

El experimentado dirigente Flor Meléndez coincidió con González.

“Harden ha cargado el equipo durante los pasados años y tiene la luz verde para hacer lo que quiera cuando tiene el balón en sus manos. La bola tiene que morir en él. El juego ha cambiado, es más rápido y también se tira más rápido. Los jugadores tienen luz verde para tirar cuando cruzan la mitad de la cancha”, indicó el técnico, que el año pasado dirigió a los Indios de Mayagüez. 

Incluso, a Meléndez no le extrañaría que Harden, Jugador Más Valioso en la liga en el 2018, supere los 40 puntos por juego en la temporada. 

“Puede y, en su momento, Doncic, quien ha demostrado ser un fuera de serie”, concluyó.