Por casi tres parciales, Puerto Rico y Argentina estuvieron nariz con nariz en el marcador, pero en los últimos 13 minutos de juego los argentinos gozaron de un festival de tiradas libres para despegarse y ganar eventualmente por 20 puntos, 105-85, para así conseguir el quinto puesto en el baloncesto de los Juegos Panamericanos en Toronto, Canadá.

Puerto Rico trató y trató, pero el silbato estuvo demasiado de fino en su contra todo el desafío, incluyendo la friolera de seis faltas técnicas, una falta antideportiva y una expulsión durante el transcurso del partido.

De hecho, tan temprano en el juego como restando 4:39, José Juan Barea recibió la primera de éstas para ayudar a Argentina a irse al frente 10-6.

Más tarde, con los boricuas al frente, 37-36, una dudosa jugada en la que Javier Mojica perseguía al base Facundo Campazzo y el argentino se cayó al piso sin contacto alguno – como se vio en la repetición televisiva – el boricua fue castigado con una falta antideportiva. Esto, a su vez, provocó una airada reacción del dirigente de Puerto Rico, Rick Pitino, a quien también le pitaron otra técnica. La secuencia terminó costándole seis puntos a Puerto Rico, contando el canasto posterior de Nicolás Burssoni para irse al frente, 42-37, antes de cerrar la primera mitad.

La segunda mitad fue similar. Cada vez que Puerto Rico se pegaba en el marcador, alguna técnica lso sacaba de su ritmo. La primera de ellas en esa segunda fase fue a Larry Ayuso con 6:13 del tercer parcial, dándole a Argentina ventaja de, 58-52.

Aún así, Puerto Rico seguía joseando en defensa por toda la cancha y a base de los turnovers provocados llegaron a empatar el juego, 61-61, restando 2:59.

Pero el silbato volvió a hacer de las suyas con dos técnicas a Jezreel de Jesús y otra a Mojica que ayudaron a Argentina durante crucial avance de 13-2  para cerrar el tercer parcial arriba, 74-63.

Para colmo de males, con Puerto Rico haciendo otro avance para acercarse, 84-75, faltando poco más de seis minutos por jugar al alero Paul Graham le infligieron otra técnica al gesticular molesto consigo mismo por una falta cometida. Graham se molestó por la técnica que consideraba injusta y terminaron expulsándolo del juego.

Básicamente ahí se enterraron las posibilidades de los boricuas, que jugaron de trámite el resto del desafío.

Por Argentina, Juan Manuel Torres y Federico Aguirre tuvieron 13 puntos cada uno. Por Puerto Rico, De Jesús fue el mejor con 12.

Tras el partido, Barea, que apenas jugó nueve minutos debido a cuatro faltas personales, increpó agriamente al boricua Aníbal García, quien labora en la asignación de árbitros en FIBA Américas y es su director técnico.