LeBron James fue eliminado en cinco juegos, Kevin Durant fue barrido y Stephen Curry no clasificó. Ese fue el escenario de la primera ronda de los playoffs de la NBA, uno que si hubiese sido descrito hace unos años a un aficionado quedaría incrédulo.

Se trata de los tres jugadores que dominaron la liga en la pasada década. Entre los tres, han alzado ocho de los 14 campeonatos que se disputaron desde el 2010, pero eso no intimidó a las nuevas estrellas que causaron sensación en la primera ronda de la postemporada.

A diferencia de campañas anteriores, ya no eran James, Durant o Curry los protagonistas del espectáculo, sino canasteros como Anthony Edwards, Shai Gilgeous-Alexander y Luka Doncic. Tampoco se quedó atrás Jayson Tatum, que a pesar de una discreta actuación en la serie contra el Heat de Miami, se ha establecido en los últimos años como una de las nuevas caras de la liga.

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Anthony Edwards donquea el balón en el partido del pasado domingo ante los Suns.
Anthony Edwards donquea el balón en el partido del pasado domingo ante los Suns. (Ross D. Franklin)

El ascenso de estrellas como Edwards a cuenta de la eliminación de un veterano como Durant y el desempeño de un joven equipo como el Thunder de Oklahoma City podrían significar el comienzo de una nueva era en la NBA.

Y para el exenebeísta puertorriqueño y dirigente en el Baloncesto Superior Nacional, José Juan Barea, los resultados de la primera ronda de la postemporada son pruebas de la dirección que está tomando la liga.

“La NBA se está poniendo bien joven. Es una liga bien rápida y el tempo de juego ha cambiado. Los equipos jóvenes se están viendo muy bien, así que eso es lo nuevo que hay”, dijo Barea en entrevista con Primera Hora.

“Yo creo que ahora para Curry y LeBron ganar tienen que juntarse con un grupo de jóvenes que puedan durar toda la temporada”, opinó.

En el caso del Thunder, dominó la temporada regular al terminar con el mejor récord en la Conferencia del Oeste (57-25) y barrieron a los Pelicans de Nueva Orleans en la primera ronda con un equipo cuyos jugadores tienen una edad promedio de 23.4 años. Mientras que James tiene 39 años; Curry, 36; y Durant, 35.

Sin embargo, para el asistente de los Leones de Ponce y analista de la NBA, Carlos Morales, la temprana eliminación de los astros de los Lakers, Suns y Warriors no significa que su tiempo imponiéndose en la liga finalizó.

“Estamos evaluando a individuos en un juego de conjunto. LeBron James está jugando en un nivel bien alto, pero los Lakers no pudieron con Denver. Lo mismo con Curry antes de lastimarse. Y Phoenix, que fue barrida, la estrella de su rival (Anthony Edwards) terminó hablando del nivel de Kevin Durant en la conferencia de prensa… Hay que hacer una diferencia con lo que ellos pueden llegar con sus equipos y lo que pueden ser como jugadores individualmente. Yo creo que esos jugadores todavía mantienen un nivel alto”, expresó Morales.

Stephen Curry, de los Warriors de Golden State, y LeBron James, de los Lakers de Los Ángeles, durante un partido de la temporada regular 2023-24 de la NBA.
Stephen Curry, de los Warriors de Golden State, y LeBron James, de los Lakers de Los Ángeles, durante un partido de la temporada regular 2023-24 de la NBA. (Ashley Landis)

Lo cierto es que James tuvo una gran actuación frente a los Nuggets de Denver con un promedio de 27.8 puntos, 8.8 asistencias y 6.8 rebotes en cinco partidos. Al igual que Durant con una media de 26.8 unidades en cuatro encuentros ante los Timberwolves de Minnesota.

“Hay otros jugadores que tienen un nivel bien alto y tienen la suerte de estar en buenos equipos. Ese es el caso de Edwards en Minnesota, Gilgeous-Alexander en Oklahoma City y (Nikola) Jokic en Denver”, abundó el experimentado asistente de los Leones.

¿Qué decisión tomará LeBron?

Con un panorama como este, la venidera temporada muerta de la NBA luce como una de las más interesantes en años recientes. Al momento, no hay rumores de que Curry esté descontento en Golden State, pero ha circulado que Durant no estaba a gusto con la manera que el dirigente Frank Vogel lo estaba utilizando.

Pero el caso más llamativo es el de James, quien dijo: “No voy a responder eso”, cuando un periodista le preguntó si habría jugado su último partido con los Lakers tras ser eliminado.

El cuatro veces campeón de la NBA tiene una opción en su contrato para la temporada 2024-25 de $51.4 millones, pero podría declinarla y probar la agencia libre por primera vez desde 2018. El máximo anotador en la historia de la liga tendrá que analizar distintos escenarios como volver a pertenecer a un equipo contendor, jugar con su hijo o seguir disfrutando del estilo de vida de Los Ángeles con su familia.

Son múltiples las opciones que tendrá James sobre la mesa y Barea, quien junto a los Mavericks de Dallas lo venció en la final del 2011, no descarta que se una a sus antiguos rivales en Golden State.

LeBron James junto a su hijo Bronny James durante un juego de la preparatoria Sierra Canyon.
LeBron James junto a su hijo Bronny James durante un juego de la preparatoria Sierra Canyon. (Jay LaPrete)

“Para mí, se queda en Los Ángeles, pero no te sorprendas que se junte con Curry y Draymond Green. Se juntarían los viejitos para hacer un ‘run’ más. Estaría nítido para la NBA, pero yo creo que está bien cómodo en LA con la familia y todas las cosas que tiene allí”, comentó el entrenador de los Mets de Guaynabo.

No sería algo descabellado, pues 24 horas antes de la fecha límite de cambios de esta temporada, los Warriors hicieron un intento infructuoso de convencer a los Lakers y James de un intercambio que lo emparejaba con Curry.

En cambio, Morales sostuvo que lo que suceda con Bronny James, el hijo del astro de los Lakers, podría jugar un papel importante en la decisión que tome James, al igual que la manera en la que se encuentre su familia en Los Ángeles.