Si los Vaqueros de Bayamón cuentan con un “fantasma” en Franklyn Western, los Piratas de Quebradillas tienen a su “asesino silencioso” en Greg Stevenson.

El debutante canastero estadounidense que fue nativizado esta temporada ha pasado por las filas de los Piratas casi desapercibido pero, cuando ha tenido la oportunidad de producir, ha compensado a su quinteto con sólidas aportaciones ofensivas.

“Algunos de los compañeros de juego que he tenido me conocen por el ‘asesino silencioso’ porque al final de la jornada nadie se explica de dónde salieron mis puntos”, admitió Stevenson, quien en el tercer partido de la serie reemplazó al lesionado David Huertas en el cuadro regular y aportó 22 puntos.

“Puede ser que los jugadores del equipo contrario no me conocen, a veces me dan el tiro abierto y los hago pagar el precio”, agregó Stevenson.

De hecho, en un principio, hasta en su propio equipo fue subestimado.

“Cuando llegué, tuve que probarme porque, a pesar de mi experiencia en varias ligas internacionales, nadie aquí conocía mis habilidades. Tuve que ganarme los minutos en las prácticas y aprovechar cada ocasión para que el dirigente Omar González me diera su confianza”, dijo Stevenson, quien sobresale por su capacidad de moverse sin el balón y anotar con gran efectividad a media distancia, muy similar a Western.

“He ganado campeonatos en otras ligas, como la NBDL con Ashville Attitude en el 2004 y en la CBA con los Yakima Sun Kings en el 2006. Ya he estado en este tipo de situaciones. Sólo espero que ésta sea la primera de muchas series finales en el BSN, especialmente en Quebradillas”.