Las ansias de estrenarse como jugador profesional, de entrar a una cancha por primera vez desde marzo y el retraso en cuanto a una decisión sobre el torneo 2020 del Baloncesto Superior Nacional (BSN) fueron factores decisivos para que la primera selección del Sorteo de Jugadores de Nuevo Ingreso del BSN, Georgie Pacheco, se decidiera por debutar como profesional en la Liga Nacional de Baloncesto Profesional (LNBP) de México.

Pacheco, nacido y criado en Ponce, fue escogido por los Leones de esa ciudad en enero, cuando aún jugaba para Liberty University en la División I de la NCAA, con quienes ganó el título de la Atlantic Sun Conference por segundo año consecutivo, pero tuvo una despedida amarga del baloncesto universitario cuando el Torneo de la NCAA fue cancelado por la pandemia.

“Estaba esperando por el BSN, pero cada vez que se reunían decían que no sabían qué decisión tomarían sobre cuando comenzar y México ya tenía algo ‘set’ ”, dijo desde Virginia el armador de 6′1″. “Hace como tres semanas me hicieron una oferta, tuve un par de semanas para decidir y al final lo hice”.

En México, el canastero de 22 años jugará con las Panteras de Aguascalientes, que tendrán como dirigente al técnico boricua Manolo Cintrón. La LNBP decidió a principios de julio que jugaría su temporada con 12 equipos entre el 10 de septiembre y el 6 de diciembre.

Pacheco dijo que él y su agente se mantuvieron con comunicación con la gerencia de los Leones de Ponce, pero que ante la incertidumbre en la que se encuentra el BSN tomó la decisión, junto a sus padres y su agente, de estrenarse en suelo mexicano.

“Estuve hablando con el gerente general (de los Leones de Ponce, Gabriel Ortiz) tan pronto me ofrecieron. Me comuniqué mucho con mi agente y él hablaba con ellos. Mi agente y yo, especialmente yo, no quería esperar a que se decidiera el BSN porque si no se juega, me quedo sin jugar en ninguna parte”, explicó Pacheco.

“Si no fuera por la pandemia ya hubiese debutado en Ponce, pero esto llegó y no pude hacerlo. Yo ya quiero empezar mi carrera. Tengo que arrancar y elevar mi reputación, poner mi nombre por ahí para tener otras oportunidades en el futuro. Y no quería estar un año entero entrenando y sin jugar”, agregó.

El año pasado, la LNBP contó con sobre 25 jugadores y media docena de entrenadores boricuas en su torneo, que poco a poco se ha convertido en una alternativa de trabajo para los canasteros del patio por el trato hacia los canasteros del exterior, una aparente solidez financiera y un calendario de juego que no confligía con el del BSN.

El BSN se mantiene a la espera de tomar una decisión sobre su torneo y se autoimpuso una fecha límite del 15 de agosto para hacerlo. De decidir continuar el torneo detenido en marzo, arrancarían el 25 de septiembre, lo que podría causar conflictos a otros jugadores que participan anualmente en la LNBP.