Recién llegados de vuelta al Baloncesto Superior Nacional (BSN), los Mets de Guaynabo comenzaron la temporada del 2020 con un buen impulso y buen apoyo de la fanaticada, que hacia años que no veía baloncesto en el Mario ‘Quijote’ Morales.

Pero en medio de ese favorable inicio, les ha tocado, como al resto de la humanidad, detener el tren y bajarse para quedarse en sus casas como medida para combatir la pandemia de coronavirus que afecta el globo terráqueo.

“No sabremos que pasará con los Mets y con el BSN hasta dentro de unas semanas. Sabemos que este paro por el coronavirus ha sido un duro golpe, que sería un segundo golpe para el equipo porque la respuesta de los auspiciadores no ha sido la que se esperaba. Nada de esto está en nuestras manos, pero sé que ellos (los propietarios del equipo) tienen un compromiso con el baloncesto y con los Mets de Guaynabo”, manifesto el gerente general del equipo, Alfredo Morales.

El propietario del quinteto, Marc Grossman, confirmó las palabras de Morales en cuanto a su compromise de que “los Mets llegaron para quedarse”. Y aunque el cierre provocado por la pandemia posiblemente les esté haciendo un hueco económico luego de una multimillonaria inversión para traer el equipo de vuelta, dijo que por el momento no piensa en eso.

“Ahora mismo no estamos pensando en el dinero. Ahora lo que temenos en mente es que todo el mundo esté saludable. No es el momento de pensar en eso. Hay problemas mayores en el mundo”, dijo Grossman desde su residencia en Río Grande.

Grossman indicó que luego de que el BSN puso pausa a su temporada el pasado 12 de marzo. Los jugadores importados, Rakeem Christmas, Isaiah Austin y Daniel Hamilton, fueron enviados a lugares seguros donde pasar la emergencia, y según Grossman, no todos se han marchado de Puerto Rico, al igual que los que juegan como locales.

De hecho, agregó que el equipo tiene la palabra de que todos los jugadores desean regresar y que tendrán a su equipo completo una vez se reanude la acción. Planifican una serie de partidos de fogueo cuando sea permitido para que sus jugadores regresen a condiciones de juego.

“Estamos ansiosos porque el BSN regrese. Estamos 100% comprometidos con el equipo, muy impacientes porque se vuelva a jugar. Pero queremos que todo el mundo esté seguro, cómodo, cuando todos estén listos y cuando sea seguro poder congregarnos otra vez para brindarle alegría a la gente”, expresó el estadounidense.

“Hemos encontrado que esta experiencia ha sido tan recompensante como esperábamos. Hemos visto que los fanáticos están más emocionados que lo que imaginábamos. Y eso se vio en nuestros primeros juegos, cuando realmente excedimos las expectativas. Es sorprendente el apetito por este deporte y esperamos contribuir al resurgir de esta liga”, dijo.

En cuanto a la posibilidad de que la parte económica pueda afectar que los Mets regresen una vez el BSN se reanude, Grossman dijo que su compromiso con eso es total.

“Absolutamente. Este es un proyecto a largo plazo. Mientras los fanáticos estén dispuestos a ver baloncesto, ahí vamos a estar”, finalizó.