Para la ventana clasificatoria anterior de este sistema para la Copa del Mundo FIBA 2023, el ‘shooting guard’ y delantero pequeño de 27 años, Justin Reyes, tuvo que tomar una importante decisión respecto al Equipo Nacional de baloncesto de Puerto Rico, y aún recuerda lo mucho que le pesó.

Reyes no es un rookie con el seleccionado. Ya había visto acción con la camiseta boricua durante los Juegos Panamericanos de Lima 2019. Y no le fue mal, pues Puerto Rico ganó plata en el baloncesto masculino al caer ante Argentina.

Esta vez, al recibir el llamado, lo aceptó de inmediato.

“Estoy muy agradecido por la oportunidad. Vine a probar que puedo hacerlo y quedarme con el grupo. He tratado de desarrollar mi relación con los demás en el grupo”, manifestó el canastero de 6′4″ nativo de Haverhill, Massachusetts.

Este dijo que le sorprendió un poco que le llamaran para unirse a la preselección porque, “para la pasada ventana me llamaron, pero acababa de llegar a Italia, así que se me hacía difícil regresar”, relató. “No estaba seguro de cuándo sería la próxima oportunidad. Fue difícil para mí tomar el riesgo de decir no, pero la situación fue complicada”.

Reyes tenía experiencia en la NCAA y en la G League antes de debutar con los Indios de Mayaguez en el BSN en la campaña 2018-19. Con ellos militó en las temporadas de 2019-20 y 2020-21, antes de llegar a un acuerdo con el Openjobmetis Varese de la Serie A de la Liga de Italia para la temporada 2021-22.

Y con tan solo una temporada en Europa, el juego de Reyes ha dado un giro enorme según el dirigente de la selección, Nelson Colón, quien en una entrevista aparte lo mencionó como una de las sorpresas del difícil proceso de armar el seleccionado.

“Está mucho más inteligente y está viendo otras cosas con la experiencia que ha adquirido en Italia”, manifestó Colón.

Reyes admite que el cambio ha sido real.

“Europa realmente me abrió los ojos en cuanto a lo que uno puede hacer como jugador. Algunas veces hacer menos es mejor, y otras veces hay que esforzarse más. Allá es más defensivo y supercompetitivo. Llegamos a las prácticas y queremos competir de inmediato”, contó.

Con esa experiencia sumada a su resumé, y una nueva oportunidad para sudar la camiseta del país de su madre, oriunda de Quebradillas, Reyes reafirmó que su compromiso es a largo plazo.

“Cuando me quieran llamar ahí estaré. Y estaré listo. Llevo un tiempo listo”, sostuvo.

En cuanto a su relación con la gerencia de los Indios de Mayaguez del BSN, dijo que todo está muy bien y que el equipo entiende que ha tenido un año completo sin parar luego de salir de una lesión.

“Mi cuerpo necesita descanso y necesito fortalecer algunas partes de mi cuerpo para poder competir de la manera en que sé que puedo hacerlo”, dijo el canastero, quien agregó que, hasta donde él sabe, no ha recibido oferta alguna para los campamentos de entrenamiento de la NBA como los tienen Tremont Waters, George Conditt y Phillip Wheeler. Este tiene un año más de contrato en Italia.

Cuando se le preguntó sobre una posible participación con los Indios, Reyes dijo que podría suceder, pero se pronunció cuidadosamente.

“No es imposible. Uno nunca sabe. Yo no pensaba estar en este grupo (selección) hace una semana. Pero recibí la llamada. Si pasan a los playoffs, yo podría, pero hay muchas cosas que tendríamos que discutir y asegurarnos de que regrese sano a Italia”, expresó.

Reyes, quien regresa a Italia en agosto, dijo que para jugar con los Indios necesitaría la aprobación del Openjobmetis Varese, “pero al momento no ha habido la necesidad de llegar a eso”.

Ha estado al tanto de la actuación de Mayagüez y piensa que “el equipo tiene ahora el mejor grupo desde mi campaña de novato con Flor Meléndez. Juegan superbién y tienen buenos líderes. Les ha tomado un par de años encontrar el camino, pero van por el correcto”.