Hay muchas respuestas de una palabra que podrían describir el estado de la Conferencia Oeste de la NBA: Saturada, variada, repleta, desafiante. Todas le quedan bien.

El dirigente de Minnesota, Chris Finch, tiene también un adjetivo: “Brutal”. Y ese también funciona.

Los Warriors de Golden State, campeones de la NBA, son candidatos de nuevo, pero no son pocos los equipos que inician la temporada pensando que tienen lo suficiente para superar al monarca.

Los Clippers de Los Ángeles tendrán a Kawhi Leonard de regreso, los Suns de Phoenix han ganado más partidos en la temporada regular que cualquier otro equipo en las últimas dos campañas, Denver tiene al dos veces Jugador Más Valioso Nikola Jokic, los Mavericks de Dallas cuentan con Luka Doncic, un candidato a ese galardón, y los Grizzlies de Memphis pueden decir lo mismo de Ja Morant.

¡Ah!, y están los Lakers de Los Ángeles con LeBron James, quien inicia su 20ma temporada. Sigue mostrando facultades y está a aproximadamente 50 partidos de alcanzar a Kareem Abdul-Jabbar como líder anotador.

“Cuando haces la labor ves los resultados”, dijo James.

El dirigente de primer año de los Lakers, Darvin Ham, sabe que un gran verano o una gran alineación antes de la temporada no garantizan nada. Fue asistente de los Lakers en la temporada 2012-13, cuando el equipo inició con una alineación que incluía a Steve Nash, Kobe Bryant, Metta World Peace, Pau Gasol y Dwight Howard.

Ese equipo contaba con dos jugadores que están ya en el Salón de la Fama, Nash y Bryant, y otros dos que probablemente lo estarán algún día, Gasol y Howard. Fueron titulares juntos en siete partidos que terminaron 0-7.

Los Lakers tuvieron a tres dirigentes durante esa temporada plagada de lesiones y ganaron 45 encuentros para perder por barrida en la primera ronda ante San Antonio.

“Hay mucho trabajo previo, mantenerse saludables es lo más importante”, aseguró Ham. “Lo más importante es unirnos como equipo”.

Un vistazo al Oeste, prediciendo el orden en el que terminarán.

Clasificarán a los playoffs

Clippers: Seguramente Leonard le recordará pronto a la liga que sigue siendo de élite. Si Paul George se puede mantener saludable y si aún le queda algo a John Wall —los Clippers deben ser inteligentes con sus minutos— entonces este equipo podría ganarlo todo.

Golden State: Duda de los campeones bajo tu propio riesgo. El problema de Draymond Green es “una crisis”, como lo describió el entrenador Steve Kerr, pero los Warriors parecen ser un grupo que puede lidiar con eso. Y cuentan con Stephen Curry, Klay Thompson y una talentosa base de jóvenes.

Phoenix: El vergonzoso séptimo partido en casa la temporada pasada no será olvidado fácilmente y tampoco el receso de temporada fue fácil debido al escándalo con el dueño Robert Sarver. Devin Booker está en su mejor momento y Chris Paul no tiene muchas más oportunidades de ganar finalmente un campeonato. Aún sigue siendo un equipo talentoso.

Denver: Lo único que tienen los Nuggets es al dos veces Jugador Más Valioso Jokic y a Jamal Murray y Michael Porter Jr. de regreso. Hay mucho que agrada.

Memphis: Sería poco realista esperar otra temporada de 56 victorias, pero Morant tiene calibre de Jugador Más Valioso y el equipo tiene todo para ser la envidia.

Minnesota: Sí, los Timberwolves se gastaron todo para adquirir a Rudy Gobert. Pero ponerlo al lado de Karl-Anthony Towns les da un poderío como a nadie más. D’Angelo Russell y Anthony Edwards siguen mejorando.

En la guardarraya

Dallas: Doncic está en mejor forma y será candidato al Más Valioso tras un gran verano con Eslovenia en el Eurobásquet. Los Mavs necesitan encontrar la manera de que Doncic no cargue con todo el peso.

Lakers: El gran misterio en el Oeste y quizá de la liga. James se dirige a convertirse en el anotador histórico. Anthony Davis aún puede ser un problema para sus adversarios —cuando está saludable— y Russell Westbrook quiere silenciar a sus críticos, pero ¿funcionará?

Sacramento: El nuevo dirigente Mike Brown instauró una nueva cultura. La adquisición de Kevin Huerter fue brillante y los Kings tendrán muchos puntos. Será difícil avanzar en una conferencia cargada, pero lo intentarán.

Nueva Orleans: Los Pelicans se encendieron en el momento ideal el año pasado, obtuvieron experiencia en postemporada y ahora tendrán de vuelta a Zion Williamson después de que no disputó la campaña anterior. No muchos equipos acogen a un entrenador como Nueva Orleans lo hizo con Willie Green. Pero el Oeste es muy complicado.

Mínimas posibilidades

Portland: Damian Lillard es un jugador con una misión y es que los Blazers mejoren en un año. Pero, otra vez, el Oeste es muy complicado.

Utah: Incluso después de que deshacerse de Donovan Mitchell y Gobert, el Jazz cuenta con talento. No suficiente, pero el dirigente Will Hardy tendrá que jugar a la defensiva con Utah. Eso es seguro.

Houston: Ésta es la porción de lotería de la lista. Houston tiene talento joven y un buen dirigente en Stephen Silas, pero el equipo necesita más en este momento en el Oeste.

Oklahoma City: La ausencia de Chen Holmgren esta temporada significa que el Thunder volverá a la lotería. Es un año de desarrollo para un equipo con grandes activos de draft.

San Antonio: Gregg Popovich no añadirá muchas victorias a su récord de la NBA esta temporada, pero les demostrará a sus jugadores que tienen con qué ganar a futuro. También tendrá que degustar su vino francés esperando tener algo de qué hablar en los siguientes años con el prospecto Victor Wembanyama.