LOS ÁNGELES — La oferta para comprar Los Ángeles Clippers por $2,000 millones está ahora en tierra de nadie.

La fecha límite de la propuesta se cumple la semana que viene, y un juez aplazó el jueves la siguiente sesión de un juicio que afecta directamente a la operación. Sin embargo, los abogados dicen que es probable que se amplíe el plazo de la oferta.

Los abogados de Donald Sterling, propietario del equipo y ahora caído en desgracia, dijeron al juez que hacen falta más testigos, pero que no podían volver a la sala hasta el 21 de julio.

De modo que el juez superior Michael Levanas aplazó la siguiente audiencia y programó más sesiones que concluirían con los argumentos de cierre del 28 de julio.

En realidad, el destino de los Clippers depende de la NBA, que ha vetado a Sterling de la liga de por vida por hacer declaraciones racistas, y ha indicado que si no se completa la venta para el 15 de septiembre, confiscará y subastará la franquicia.

La esposa de Sterling, Shelly Sterling, testificó el jueves que el comisionado de la NBA, Adam Silver, le dijo hace varias semanas que consideraría reducir el veto a su marido a un solo año si aceptaba vender.

El propietario parecía ansioso por encontrar un comprador hace unos meses, pero más tarde cambió de opinión, señaló su esposa.

Ahora, Sterling ha prometido que nunca venderá y ha presentado una demanda para frenar el acuerdo al que llegó Shelly para vender el equipo al ex director ejecutivo de Microsoft, Steve Ballmer, por 2.000 millones de dólares.

En un testimonio anterior, dos médicos contratados por la señora Sterling para examinar a su marido declararon que el empresario de 80 años padece Alzheimer y es mentalmente incapaz de seguir actuando como administrador del fondo familiar que posee los Clippers.

La fecha límite actual de la oferta de Ballmer es el próximo martes, aunque su abogado, Adam Streisand, señaló fuera del tribunal que hay una provisión para ampliar esa fecha al 15 de agosto si se están haciendo progresos en el tribunal.

Sin embargo, el martes es también el día en el que la NBA tenía previsto votar la oferta de Ballmer, y no hay acuerdo sin que el juez apruebe la operación.