Toda acción viene acompañada de consecuencias.

Si piensa lo contrario, solo basta con preguntarle a Shaquille O’Neal. El retirado jugador convertido en analista de la NBA, aceptó lo que parecía una inocente apuesta con Dwayne Wade y ahora está sufriendo el resultado.

O’Neal estaba seguro los Bucks de Milwaukee sacarían de la cancha al Heat de Miami, pero las cosas no fueron como anticipó. Fue Miami el eventual ganador del partido por 16 puntos. Enseguida, Wade quería algo a cambio y no necesariamente dinero.

Wade retó a O’Neal para que se dejara crecer el pelo para así revelar el estatus de su calvicie. Ni corto ni perezoso, O’Neal demostró que es un hombre de palabra y se dejó crecer el pelo lo suficiente para arrancar carcajadas por la rareza del estilo.