Tany Pérez se ríe tras su salida de los Marlins de Miami, en particular por su choque con quien ahora es ejecutivo y codueño del equipo, el exjugador de los Yankees, Derek Jeter.

Cuenta el hall of famer cubano e hijo adoptivo de Puerto Rico que su salida de los Marlins, tras más de una década de trabajo, fue disfrazada detrás de su rechazo a una oferta reducida en dinero y responsabilidades para regresar a trabajar con el equipo. “(Jeter) Lo hizo ver como que nosotros fuimos los que no aceptamos”, dijo Pérez, quien salió del equipo junto al también hall of famer Andre Dawson y el exMarlins, Jeff Conine, a Primera Hora.

Pérez dijo que todo comenzó cuando la nueva administración mandó en octubre al entonces presidente del club, David Samson, a decirle a él, así como a Dawson y Conine, que no los querían más en el equipo. 

“Nos llamó y nos dijo que estábamos fuera”, dijo Pérez, quien trabajaba como asistente especial del equipo. 

La noticia agitó a la ciudad de Miami, que levantó la voz, dijo Pérez, y Jeter decidió ante el revuelo, reunirse con él, así como con Dawson y Conine, para expresarles que la organización sí los necesitaba dentro del equipo.

“Dijo que no era así, que quería que siguiéramos en la organización”, dijo.

Pero luego, agregó Pérez, Jeter envió al gerente a una reunión con el trío para decirles que sus responsabilidades eran externas al terreno y que, en el caso de Pérez, su sueldo sería de $25,000.

Pérez dijo que ahí terminó todo. “Me eché a reír. Le dije que eso era una falta de respeto. Hacía mucho tiempo que no ganaba eso. Se notó que no nos querían”, dijo Pérez.