El boricua Carlos Correa regresa a los Astros de Houston tras un cambio desde los Twins de Minnesota, según reportes divulgados por varios medios, incluido Jeff Passan de ESPN y Brian McTaggart del portal MLB.com.

El torpedero puertorriqueño, de 29 años, regresará así a la organización con la que debutó en 2015, ganó el premio Novato del Año ese mismo año y conquistó la Serie Mundial en 2017.

El cambio finiquitado una hora antes que cerrera el periodo de cambios hoy ha sido por el lanzador zurdo Matt Mikulski, quien irá a Minnesota, y un desembolso de dinero de $33 millones que le estarán enviando los Twins a los Astros para ayudarles a pagar el resto de los $96 millones que le adeudan a Correa hasta el 2028. esta información fue reportada porMcTaggart de MLB.

Correa se mantuvo con los Twins tras firmar un contrato a largo plazo en 2023, pero el equipo ha tenido una temporada por debajo de las expectativas y recientemente dio señales de estar dispuesto a reestructurar. El movimiento marca un giro significativo en la estrategia de los Astros, que buscan profundidad ofensiva y liderazgo veterano en la recta final de la temporada.

El boricua, quien había minimizado rumores recientes sobre un posible regreso a Houston, tiene promedio de .267 con 7 cuadrangulares y 40 carreras impulsadas esta temporada.

Correa formó parte clave del núcleo dorado de Houston junto a José Altuve, Alex Bregman y Yuli Gurriel. Su retorno podría representar un impulso tanto emocional como competitivo para los Astros, que luchan por mantenerse en la contienda en la División Oeste de la Liga Americana.

Ni los Astros ni los Twins han emitido comentarios oficiales hasta el momento.

Todo eso aparte, Correa vuelve a su casa.

El torpedero ha sido traspasado justo antes de la fecha límite de cambios en las Grandes Ligas. Para completar el traspaso, Correa tuvo que renunciar a su cláusula de no cambio, decisión que tomó motivado por la oportunidad de regresar al equipo con el que debutó y se coronó campeón de la Serie Mundial.

Correa, ahora 30 años, ha enfrentado una temporada inconsistente en el plato, incluyendo una línea ofensiva irregular y su nivel de poder en baja, pero aún es valorado por su liderazgo, inteligencia de juego y defensa segura.

El boricua tiene contrato garantizado hasta 2028 por $96 millones, con opciones de club hasta 2032. Su salida marca un giro en la estrategia de los Twins, mientras que en Houston, su regreso representa tanto un refuerzo competitivo como un movimiento emocional de alto impacto.