José Orlando Berríos y Javier Báez tienen que haber compartido en la vida cientos de encuentros, cenas y fiestas. Nunca, sin embargo, se había enfrentado en un terreno de béisbol de las Grandes Ligas hasta la noche de ayer domingo.

A los cuñados, bueno realmente concuñados, ya que ambos están casados con una pareja de hermanas, les tocó finalmente el domingo ese primer encuentro cuando los Twins de Minnesota enviaron a la loma a Berríos para enfrentar a los Cubs de Chicago y de Báez en el estadio Wrigley Fields. Báez es el esposo de Irmarie Márquez y Berríos esposo de Jannieliz Márquez.

Fue una primera vez en 114 salidas previas en la carrera de Berríos, dos de esas ante los Cubs desde que debutó en las Mayores en el 2016. Báez debutó en las Mayores en el 2014. Sus enfrentamientos están limitados a juegos de interligas porque los Twins son parte de la Liga Americana y los Cubs de la Nacional.

Y la primera batalla la ganó el lanzador, quien eliminó a su cuñado en dos turnos, uno por bombo de foul en la zona de primera base y el otro por jugada de selección que forzó un out en el plato.

Berríos se llevó la victoria, su quinta de la temporada y la número 48 de su carrera. Báez tuvo otros dos turnos en el partido ante el relevo de los Twins y se fue en blanco en ambos.

Báez llegó al partido con promedio de .307 ante los Twins, esto en 26 turnos desde el 2016 ante ese equipo, incluyendo el 2018 en que se fue de 16-7.

A Berríos, por su parte, los Cubs le bateaban de 23-9 en sus enfrentamientos previos entre el 2019 y 2018.

Sin embargo, lo acontecido entre Berríos y Báez se quedó en familia, como ambos escribieron como antesala al partido, que concluyó en una blanqueada 4-0 para los Twins.

Además de compartir en familia, Berríos y Báez han compartido también acción en obras benéficas en Puerto Rico para ayudar a los necesitados y enfermos. También suelen entrenar juntos durante la temporada muerte y este año durante el receso del béisbol por causa de la pandemia del coronavirus. .