Los Atenienses de Manatí de la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente (Lbprc) designaron al exjugador de las Grandes Ligas, José ‘Cheo’ Molina como su dirigente para la temporada 2020-21 que arrancará a principios de diciembre.

El propietario de la novena, Javier Hernández, confirmó el miércoles el nombramiento del coach de receptores de los Angels de Los Angeles y explicó que una situación familiar imprevista que sufrió el dirigente del pasado año, Héctor ‘Boliche’ Ortiz, hizo imposible que este regresara al mando del equipo.

“Eso fue tan reciente como ayer (martes). El me llamó porque ya teníamos todo ‘seteado’. Ya él estaba llamando a jugadores para ver cómo estaban para jugar. Pero me llamó y me dijo que tiene una situación familiar en la que no hay break. Es una situación en la que uno se pone sen su situación y lo apoyamos. Le dijimos que seguía siendo parte de nosotros y que hiciera lo que tenga que hacer”, dijo Hernández.

Según el propietario, el propio Ortiz fue quien sugirió nombrar a Molina, quien fue coach del banco la pasada temporada bajo el mando de Ortiz.

“(Cheo) Tiene mucho talento. Confío en su trabajo y es una persona muy profesional”, agregó Hernández, quien dijo que el nombramiento de Molina es por toda la temporada aunque Ortiz pueda resolver sus asuntos antes de los esperado.

Al grupo de coaches de los Atenienses regresan figuras como Juan ‘Porky’ López, Humberto Miranda, J.C. Meléndez y Josué Matos como coach de lanzadores. Pedro Hernández, escucha de la organización de los Diamondbacks e hijo del propietario, estará ocupando la posición de gerente general.

El dueño dijo que en la confección del equipo que ya habían trabajado ya cuenta con el JMV y Novato del Año de la pasada campaña, José Sermo, y con el receptor Juan Centeno. Con el regreso de los Tiburones de Aguadilla perdieron al jardinero Noel Cuevas y al receptor Mario Feliciano, pero la mayor parte del grupo de la pasada campaña, encabezado por Yadiel Rivera e Irving Falú, regresa junto al jardinero ambidextro importado Danny Mars, de la organización de los Red Sox.

En cuanto a las condiciones del estadio Pedro Román Meléndez, que la pasada campaña vio una gran cantidad de juegos suspendidos por lluvia y donde no se podía jugar de noche debido a la ausencia de alumbrado, Hernández dijo que los trabajos continúan y ha mejorado mucho.

Las lonas para colocar encima de las bases en caso de lluvia ya fueron adquiridas y actualmente se labora en el proceso de reparación e instalación del sistema de alumbrado.

“Están en el proceso de instalar las luces. Ya eso se está haciendo. Pero la liga (Lbprc) nos pidió tener un ‘plan b’ en caso de que no estén listas las luces listas para la temporada”, manifestó el microbiólogo. “El plan es jugar en Carolina si no están las luces”.

Además de una posible mudanza a Carolina de parte de los Atenienses, el torneo tendría a los Criollos de Caguas jugando en Cayey, proceso cuya autorización estaba pendiente. En Carolina los Atenienses compartirían estadio con los Gigantes, y el Hiram Bithorn de San Juan sería el hogar de los Cangrejeros de Santurce y del RA12. Los Indios de Mayagüez jugarán en el Isidoro García y se proyecta que los Tiburones jueguen en el Luis ‘Canena’ Márquez de Aguadilla.