Fue un juego de muchas decisiones y Dave Roberts, dirigente de los Dodgers de Los Angeles, pareció tomar todas las correctas en el quinto partido de la Serie Mundial.

Luego de una chocante y sorprendente derrota en la parte baja de la novena entrada en el cuarto partido, básicamente por errores mentales, los Dodgers atacaron temprano a los Rays de Tampa Bay en el quinto choque como para sacarse de la mente la increíble derrota del sábado y recuperaron la delantera en la Serie Mundial al dominar 4-2.

Y la mentalidad, por supuesto, está en ponerle fin a la serie el martes en el sexto desafío.

“Quiero que terminemos esto mañana (martes)”, manifestó tras el encuentro Roberts. “Me siento súper orgulloso de nuestros jugadores. Luchamos duro ofensivamente y el trabajo del bullpen fue excelente”.

Quien mejor lució posiblemente lo fue el veterano zurdo Clayton Kershaw, quien ganó su segundo juego de la Serie Mundial, la primera vez en su carrera que gana dos en una serie postemporada. Y no fue solamente eso. Fue que con sus seis ponchetes en el choque, llegó a 207 en su carrera en la postemporada, lo que es una marca para las Mayores. Rebasó la que tenía Justin Verlander con 205.

Incluso, Kershaw evitó que el corredor Manuel Margot se robara el plato en la cuarta con dos fuera y hombres en las esquinas. La reacción del zurdo fue a tiempo, Margot fue fusilado con la carrera que hubiese nivelado el partido a tres, y más que todo, le puso fin a la entrada.

“Eso es algo que no pasa mucho, pero me había pasado antes”, dijo el zurdo Kershaw a Fox. “Me sucedió una vez con Carlos Gómez en Houston. Y trabajo con los inicialistas para que eso no me suceda. Si el corredor se va, ellos me tienen que decir algo y sé cómo salirme y tirar rápido”.

Kershaw lanzó durante 5.2 entradas en las que permitió cinco inatrapables y dos carreras limpias. Dio dos boletos. Las carreras que permitió iniciaron con sencillo de Kevin Kiermaier para abrir la tercera, un triple que le conectó Yandy Díaz y que remolcó a Kiermaier, y un sencillo de Randy Arozarena que remolcó a Díaz para acercar a los Rays 3-2.

“El plan de la sexta era tirarle a solo dos bateadores. Dave y yo hablamos y me dijo que quería que llegara al menos hasta (Brandon) Lowe. No tenía mis lanzamientos en orden como los tuve en el primer juego. Así que con el plan que él hizo obtuvimos una victoria increíble. Fue un triunfo enorme”, manifestó Kershaw.

Al momento de que fuese removido, al menos Justin Turner abogó para que Roberts dejara a Kershaw un out más. Roberts dijo que le encantó ver a sus jugadores apoyándose unos a otros, pero que sabía que no le quedaba mucho en el tanque a Kershaw.

“Es bueno ver eso, pero mi decisión ya estaba tomada, y sentí que teníamos una buena alternativa con Dustin May”, agregó.

May lanzó por 1.2 entradas, cedió solo un hit y ponchó a dos. Luego, Víctor González tiró dos tercios de entrada en la que solo cedió un pasaporte y cero hits, para llevar el juego a la novena, cuando Blake Treinen se hizo cargo y ponchó a dos para cerrar el juego y apuntarse el salvamento.

“Yo creo en esos jugadores. Ha sido un camino difícil para ellos dos (May y González) en las pasadas salidas, pero tengo confianza en ellos y me hicieron lucir bien esta noche”, explicó el dirigente, quien adelantó que para el sexto partido del martes se inclinaba por usar a Tony Gonsolin como abridor.

Con los Dodgers una vez más al borde de ganar una Serie Mundial, y luego de dos oportunidades fallidas en años recientes, en el equipo hay un tipo de emoción controlada por el momento, hasta que no se dé el último out.

“Yo me siento súper emocionado, pero a la misma vez tenemos que ganar un juego más”, indicó Kershaw. “Así que tenemos que mantener la compostura por al menos un juego más”.