Con la participación de 450 niños y jóvenes, el miembro del Salón de la Fama, Roberto Alomar, dio en el estadio Hiram Bithorn una clínica de béisbol que culminó un lunes ocupado de actividades de Major League Baseball (MLB) por toda la Isla.

La actividad de Alomar, que por días fue anunciada en distintos billboards de Puerto Rico, fue todo un éxito. Los niños y jóvenes participaron en distintas destrezas, como bateo y corrido.

“Fui niño también y lo que quiero es que ellos (niños) aprovechen esta oportunidad”, dijo Alomar, quien se benefició de niño de haber sido hijo del pelotero de Grandes Ligas, Santos Alomar.

Alomar y su clínica ‘reinauguró’ el terreno del Bithorn para la serie de Cleveland y Minnesota con nostálgicos recuerdos.

“Tengo un compromiso con la juventud de Puerto Rico. Dios me bendijo con su talento. No lo puedo usar, así que lo uso dando clínicas, amor y alegrías a los niños. Esto va servir de mucha inspiración para los niños. Uno de los días de más alegrías fue aquí como jugador. Ya verán mañana cómo va a ser eso”, dijo.

Alomar fue acompañado en la clínica por Carlos Baerga, el ex segunda base que brilló con los Indios de Cleveland y quien compartió en el terreno del Bithorn con Alomar en muchas ocasiones, como la Serie del Caribe del 1995 que bautizó al entonces equipo de Puerto Rico como el ‘Dream Team’.

Baerga también se identificó con la clínica porque de niño participó de ese tipo de actividades.

“Cuando iba a clínicas era con peloteros como Jerry Morales y para mí era un orgullo. Así que estos niños también deben estar sintiendo ese orgullo”, dijo Baerga.

La clínica de Alomar, que se vio interrumpida por una lluvia, precedió a un partido de béisbol juvenil para equipos de 17 años o menos de Carolina y Aguadilla. El partido jugado bajo las luces del Bithorn lo organizó el programa RBI que coordina MLB.

Como Alomar y Baerga, múltiples peloteros profesionales estuvieron hoy inspirando vidas.

El lanzador de Kansas City, José Orlando Berríos, estuvo en la tarde en San Juan con otros cinco compañeros de equipo visitando a niños pacientes de cáncer en el San Jorge Children Hospital. Llevaron regalos y alegrías.

Por otra parte, el siore de los Indios de Cleveland, Francisco Lindor, estuvo en la mañana en Gurabo visitando su alma mater, la escuela Villa Marina, dando una clínica a peloteros y visitando el plantel. La actividad la organizó el programa ‘Players Going Home’ (Los peloteros regresas a casa).

Y el jardinero de los Mellizos de Minnesota, Eddie Rosario, dio en la tarde en Guayama una clínica en su alma mater, la escuela Rafael López Landrón. La actividad también la organizó el programa “Los jugadores regresan a casa”.