Alex Cora, por razones evidentes, quiere dejar atrás el tema del robo de señales por el que fue acusado en Major League Baseball (MLB), y no es que espere que nadie le toque el tema en adelante. Pero el dirigente de los Red Sox de Boston, a quien la organización volvió a contratar de cara al 2021, también quiere dejar en el pasado las 108 victorias de la temporada 2018, y el título de la Serie Mundial, para enfocarse en levantar de nuevo al club que llegó último en su división en la campaña 2020.

A continuación algunas de sus respuestas a temas adicionales que se tocaron durante la conferencia de prensa virtual ofrecida el martes por el equipo para oficializar su contratación como piloto, incluyendo lo que contestó a la pregunta, tal vez más difícil e inesperada de la tarde:

¿Por qué no llevar a Boston un sistema similar a lo que se utilizó en Houston en 2017 para el robo de señales con el uso de tecnología?

—Honestamente, no sentí que tuviéramos que hacer algo así. Sé que la gente no me creerá en ese sentido. ¿Por qué no traerlo aquí? No sé hombre, simplemente decidí, al final durante ese tiempo muerto (previo a la temporada 2018) no traerlo aquí. Tuvimos algunas conversaciones en los entrenamientos de primavera sobre muchas cosas… ya sabes, desde B.O.H. (Brian O’Halloran, actual gerente general) hasta Dave (Dombrowski, pasado director de operaciones), hasta la gente que estaba alrededor de MLB. Creo que en ese momento la gente estaba empezando a hablar sobre lo que estaba pasando en la liga y tú sabías que no valía la pena (intentarlo). No valió la pena. También, sabes que hay un artículo por ahí y sabes que hay un tipo que decidió dar un paso y decir lo que pasó allí, y yo pagué el precio. La manera como puedo expresarlo, es que, como que decidí que no necesitábamos hacer eso. La organización fue muy fuerte y clara sobre todo el asunto del robo señales y ya sabes lo que sucedió antes con la organización y con otras organizaciones, y me hicieron saberlo. Y en las reuniones en los entrenamientos de primavera con MLB, cuando hablé con ellos fue como ‘wow, es mejor que ni siquiera intente hacer algo así’. Esa es la forma en que puedo decirlo.

Sobre el proceso que enfrentará junto a la gerencia de los Red Sox para mejorar el equipo de cara a la temporada 2021.

—Soy un fanático del béisbol y durante el verano vi un montón de juegos, aunque alguna gente no lo crea. Pero los vi. Y hay unas cuantas cosas que vi, no solo de esta organización sino de otras, y tengo varias ideas para seguir mejorando. Así que estamos en medio de un proceso ahora mismo para continuar mejorando, y si nosotros hacemos las cosas que tenemos que hacer, veremos hasta dónde nos lleva. No fue un equipo lo suficientemente profundo como para estar al tope de la división o incluso tener un wild card. Es algo que vi en el 2019 y obviamente en el 2020.

En torno a lo aprendido durante su suspensión de una temporada, y cómo pasó el tiempo.

—En el aspecto profesional fue difícil. En el aspecto personal, hice muchas cosas con la familia a pesar de la pandemia, pero pude compartir con ellos. Me convertí en mejor cocinero y me convertí en tremendo maestro de pre kinder. Fue increíble y una experiencia única. Si te pones a pensar de las cosas que me pasaron en casa, me van ayudar a ser mejor dirigente, por la paciencia de andar con dos niños de tres años en medio de una pandemia, con la que no puedes salir de la casa, y como puedes bregar con ellos. Creo que eso me va a ayudar a ser mejor dirigente. Pero a la vez aprendí mirando el juego. No puedo decir que no aprendí mirando otras organizaciones. Las cosas que hacen, como por ejemplo lo que hacen los Dodgers en cuanto a los coaches, lo que hacen los Indians de Cleveland en cuanto al pitcheo, o lo que hacen los Rays de Tampa en cuanto a la defensa.

Los Astros, hallados culpables por el robo ilegal de señales en 2017, recibieron críticas y expresiones de repudio esta temporada pasada. ¿Estás preparado para enfrentar eso, y si has hablando con tus jugadores sobre el tema?

—Ya he tenido algunas conversaciones con algunos jugadores (de Boston) sobre eso. Si no pensara, a un nivel personal, que estoy preparado para lo que viene, probablemente hubiera declinado la llamada (la entrevista) y hubiera dicho, ‘sabes qué Chaim (Bloom, director de operaciones), no estoy listo para esto, gracias, pero no, gracias’. Sé que va a ser duro en ciertos lugares y lo entiendo. Pero mientras nos mantengamos unidos y me rodee de gente que va a estar en mi misma esquina, y entendiendo que lo que pasó, lo que pase es por mí. Yo puedo lidiar con eso. Mis jugadores tienen un trabajo que hacer, la organización está haciendo lo posible por mejorar. Pienso que voy a estar bien. Esas conversaciones fueron profundas con la familia y decidimos como familia: sí, vamos a hacer esto. Van a haber momentos grandiosos y otros difíciles, pero nos vamos a mantener unidos y vamos a continuar hacia adelante.

También se le preguntó a Cora si mantiene comunicación con Carlos Beltrán desde que ambos se vieron afectados por el informe de MLB sobre el escándalo de hurto de señas a principios de año.

—Hemos estado en contacto. Es uno de mis mejores amigos. Pienso lo mejor de él. Espero que su sueño (de ser dirigente) se cumpla. Le deseo lo mejor. Se que él me apoya. Cuando él y Jessica (esposa) se enteraron de que regresaba a los Red Sox mostraron su apoyo total. Lo agradezco. Se que desde lejos ven esto y están felices. La pregunta es si debe ser dirigente en las Grandes Ligas. Eso creo. Está preparado. Vamos a ver qué pasa en el futuro.