Hay tiros desde el outfield que ponen fuera de juego a un corredor en el plato o en alguna base. Y hay tiros que terminan en las gradas o en el dugout.

Entre medio están los tiros que le pegan en la cara a un árbitro.

Esa rara escena se vivió el lunes en la noche cuando el árbitro de primera base, Junior Valentine, recibió un pelotazo en la cara en medio de una jugada de rutina durante el partido de los Mets de Nueva York y los Cardinals de San Luis en el Citi Field.

Pero lo más impresionante fue que Valentine permaneció en el juego luego de ser atendido por un trainer.

Kevin Pillar, de los Mets, conectó una roleta por el campocorto y corría hacia primera. El siore de los Cardinals, Edmundo Sosa, fildeó la pelota y realizó un tiro tan abierto hacia la inicial que le dio directo en el lado derecho de la cara a Valentine, quien miraba concentrado hacia la almohadilla esperando el tiro y el corredor.

Valentine cayó al terreno y mostró un poco de sangrado. El inicialista de los Cardinals, Paul Goldschmidt, acudió a ver cómo estaba Valentine y en la jugada finalmente se le acreditó un hit a Pillar.

El árbitro fue tratado durante unos 10 minutos y pudo continuar en el partido.