Antonio Margarito regresó al boxeo para recuperar sus tiempos de gloria, de heroísmo y triunfo. Pero cuatro años después de su más reciente combate, lo único que encontró en el encordado fueron dudas de seguir adelante o no en el pugilismo, pues a pesar de ganar por decisión unánime (95-94, 97-93 y 96-93) a Jorge Marometito' Páez, no lució ante un rival inferior a su trayectoria.

Margarito, quien a pesar de recibir sangrientas palizas que aguantó estoico por parte de Manny Pacquiao y Miguel Cotto, ayer fue derribado en el sexto asalto por Páez, quien es un peleador ajeno a la división superwelter y a quien se le ha criticado por su falta de pegada.

Un robusto derechazo de Jorge Páez sacudió a 'Tony', quien cayó al instante de recibir otro puño izquierdo de su rival ante los más de 10 mil aficionados que acudieron a la Arena de la Ciudad de México.

Lorena, la esposa de Margarito, desde primera fila le pedía no continuar al 'Tornado de Tijuana', que se paró y al término del round se marchó a su esquina afirmando que se encontraba bien.

Antes de la pelea, Margarito declaró que si perdía con 'El Marometito', no tenía nada que hacer. A 'Tony' lo animó a salir a combatir su orgullo y la idiosincrasia guerrera que mantiene en el cuadrilátero.

'Maromerito' sólo fue dueño del sexto asalto. No le quedó energía para aniquilar a Margarito y se va a casa con su tercera derrota en sus últimos cuatro combates.

La altura de la ciudad de México ahogó a los dos peleadores que se dedicaron a sobrevivir la segunda mitad de la batalla.

'Tony' desempolvó los guantes. Sacudió su inactividad tirando jabs que lastimaron a 'Maromerito', quien fue mucho mejor peleador que el 5-1 que estuvo abajo en las apuestas.

El ojo del 'Tornado', que en sus dos anteriores pleitos fue un auténtico tormento, salió avante como los exámenes médicos pronosticaron.