Ponce. A juzgar por la marcada diferencia en experiencia y récord, era fácil pensar que el peso pluma Orlando del Valle (12-0, 10 KO) no iba a encontrar mucha resistencia por parte de Irvin Hernández (2-4-1). Sin embargo, el cotizado prospecto que reside en Nueva York necesitó de seis asaltos para finalmente vencer a su rival.

Del Valle lucía encaminado a una rápida victoria en el primer asalto cuando conectó una recta de derecha y las piernas de Hernández aflojaron, pero se rehusó caer a la lona. Desde entonces, el invicto peleador presionó constantemente, castigando los planos bajos de Hernández y, en ocasiones poniéndolo en malas condiciones.

Aunque era evidente que Hernández no estaba al nivel de Del Valle, tampoco se presentó con intenciones de ser presa fácil. Sin embargo, el constante castigo fue gastando a Hernández y, finalmente, cayó al recibir varias derechas en el rostro y no pudo recuperar.

Del Valle fue declarado ganador vía nocaut en el minuto 2:49 del sexto asalto.

“(Hernández) salió más fuerte de lo que esperaba. En el primer asalto lo lastimé y entendía que iba a caer, pero aguantó los golpes y fue cuando decidí tomar la pelea asalto por asalto hasta que eventualmente el nocaut llegó”, comentó Del Valle luego de la victoria, a la vez que indicó que sus intenciones son bajar de categoría.

“He conversado con mis promotores sobre la idea de bajar a las 122 libras. Entiendo que es el mejor peso para mí. Esta pelea no hubiese durado tanto en las 122”, agregó.

Narváez ganó la primera pelea

En el primer combate de la noche, Carlos Narváez mejoró su marca profesional a 2-0, con dos nocauts cuando su oponente Reynaldo Cintrón sufrió una lesión en el primer asalto y no pudo continuar. Oficialmente, Narváez ganó el combate vía nocaut técnico en el minuto 1:42.

Cintrón, quien permaneció sentado por varios minutos en una banqueta, necesitó asistencia médica cuando su hombro izquierdo quedó dislocado al tirar un golpe.

Entretanto, los pesos ligeros Javier Pérez (8-4, 5KO) y Alexis Cintrón (2-1, 2 KO) protagonizaron una emocionante pelea durante cuatro asaltos. Pérez utilizó efectivamente su ventaja en fortaleza y experiencia para dominar a Cintrón, quien puso en evidencia que posee una sólida quijada al resistir los mejores golpes del vencedor.

Los púgiles intercambiaron metralla en el centro del ring, pero ninguno se llevaba la mejor parte. Sin embargo, Cintrón daba señales de cansancio a medida que pasaban los minutos y sus golpes ya no eran tan certeros. Al finalizar el combate, Pérez fue favorecido en las tarjetas de los tres jueces con anotaciones idénticas de 39-37.

En un combate en la categoría superwélter (154 libras), George Meléndez se apuntó su tercer nocaut consecutivo cuando derribó en dos ocasiones a Christopher Henry en el segundo asalto camino a mejorar su marca profesional a 16-2-1, con 16 por la vía rápida.

En los momentos iniciales del segundo episodio, Meléndez coló un upper cut al mentón de Henry que siguió con una derecha para hacerlo caer a la lona. Luego de perseguirlo para castigarlo contra las sogas, Henry cayó nuevamente al recibir otra recta de derecha. El referí Ismael Quiñones Falú optó por detener el pleito.