Para que cuadrara la histórica pelea del 30 de abril entre Amanda Serrano y Katie Taylor, la primera ocasión en que dos mujeres estelarizaron un cartel en la Arena Más Famosa del Mundo, el Madison Square Garden, y en la que ganaron una bolsa de sobre $1 millón asegurado cada una, fueron muchas las cosas que tuvieron que ir cayendo en su sitio.

Pero no fue hasta que una entró a juego que todo hizo clic: la presencia de Jake Paul.

El infame exactor, influencer, boxeador, vecino de Dorado y ahora promotor de boxeo, dentro de todas sus pueriles actuaciones y otras más serias que le han llevado hasta a ser acusado de conducta sexual inapropiada, posiblemente fue uno de los principales ganadores de la noche después de las peleadoras y del boxeo femenino.

Este salió del Madison Square Garden aquella noche considerado como posiblemente uno de los principales benefactores del boxeo femenino.

“Hay que tener claro que en el boxeo femenino las bolsas eran bajitas y entonces llega Jake Paul”, manifestó el manejador y entrenador de Amanda Serrano, Jordan Maldonado. Serrano peleó en dos carteleras organizadas por Paul antes de firmar con su compañía promocional, Most Valuable Promotions, la cual copromovió el combate Taylor-Serrano.

“Su presencia en todo esto fue muy importante. La pelea, sin Jake Paul, se nos ofreció en $500,000″, recordó Maldonado. “Entonces, cuando él se suma, subió otro medio millón, que es el doble”.

Eddie Hearn y la compañía que dirige, Matchroom, tienen un contrato de promoción con Taylor y fue la principal organizadora del histórico evento, que claramente, por ser Taylor la poseedora de las fajas de las 135 libras, fue dirigido mayormente al mercado británico, donde Taylor es una de las principales figuras del deporte.

Paul, una figura que en la era de las redes sociales cuenta con poco más de 20 millones de seguidores y sus vídeos han sido vistos unos 7,000 millones de veces, tiene tan solo 25 años. Por lo que es de esperarse que muchos de sus fanáticos sean jóvenes como él o cercanos a su edad. Un público nuevo, tal vez totalmente ajeno al boxeo.

“Él trae una fanaticada diferente al boxeo, y fue muy muy importante en (conseguir) que Eddie (Hearn) decidiera darle a Amanda lo que ella valía y hacer la pelea”, agregó Maldonado. “Y al final fue un éxito total, que superó las expectativas. La gente pensaba que la pelea iba a ser regularcita porque era entre dos mujeres, pero rompimos muchas barreras”.

En un artículo del New York Post en diciembre, Serrano defendió la reputación de Paul, apodado como ‘The Problem Child’, quien a su vez ha dicho que admira a Serrano porque se vive la vida boxística 24/7, entrena con entrega total y vive en el presente.

El combate resultó con un polémico resultado.

Serrano dijo que la gente no conoce al verdadero Paul.

“El está en sus 20, y se está viviendo su vida. Pero ahora está haciendo algo grandioso y uno tiene que reconocerlo”, manifestó Serrano, refiriéndose a su gestión en la cartelera del Garden.

El propio Hearn dijo que “no es tan payaso como dice ser. Él se ha enamorado del boxeo, como le pasa a todo el mundo”.

Hearn dijo a The New York Times que los millones de ojos adicionales provenientes de las plataformas sociales de Paul “solo pueden ser algo bueno para el boxeo”, especialmente para su mercadeo.

Mientras, algunos ponen en duda el compromiso de Paul con el boxeo femenino, y lo tildan de otro evento publicitario de su parte para conseguir más seguidores y más likes. Él lo refuta.

Le dijo recientemente al Times que tuvo una visión de una trilogía entre Serrano y Taylor en la que la primera pelea era tan buena y tan brutal que provocaba una segunda pelea, “con una ganadora diferente en la revancha y la tercera pelea decide las cosas de una vez y por todas. Yo no sé, pero podríamos estar en esto durante un par de años”.

En la misma entrevista, dijo que firmó a Serrano como su primera peleadora al ver una oportunidad en la manera en que las boxeadoras “estaban siendo maltratadas”.

“Creo que es un asunto de que el boxeo necesita una tonelada de cambios, y el boxeo femenino es una de esas estructuras que tienen que ser arregladas. Traer una audiencia nueva y más joven fue una de las bases que identifiqué”, agregó.

Y este ha expresado que no le interesa que se le vea como el mecenas del boxeo femenino.

“Realmente no me importa el crédito, para ser honesto”, le dijo a The Sporting News antes de la pelea. “Simplemente me emociona ayudar a Amanda a conseguir una bolsa masiva y a unificar su división. No necesito ningún crédito, y si hay que otorgar algún crédito, lo aprecio mucho”.