El excampeón Pernell “Sweet Pea” Whitaker se retiró del boxeo en el 2001, cuando se rompió la clavícula en su último combate contra el mexicano Carlos Bojorquez. Luego de ese momento, su figura y millones fueron en descenso y desgracia al verse involucrado en numerosos casos de abuso de drogas y altercados en los cuales fue arrestado en varias ocasiones. Está sin dinero, sin prestigio y endeudado.

En el capítulo más reciente de la triste caída de "Sweet Pea", éste se apuntó una victoria en un tribunal de Virginia, donde llevaba una solicitud para que su madre y dos de sus hermanos desalojaran la casa que él les compró hace casi 30 años, describiendo la decisión del caso como un “momento hermoso”. 

El también medallista olímpico, que lleva varios años viviendo a la deriva, tomó la decisión de que su madre y hermanos salieran de la casa, pues, según su abogado, Whitaker ya no podía seguir pagando la hipoteca. La batalla legal comenzó el pasado mes de octubre y no fue hasta ayer que se dictaminó que Novella Whitaker, de 73 años y madre del boxeador, tiene que salir de la propiedad antes del 31 de marzo.

Whitaker había intentado convencer a su mamá desde el otoño pasado, según dijo su abogado, Bruce Gould a ABC News.

"Es triste para él tener que tomar medidas contra su madre, pero ninguno de la familia contribuía a las propiedades y no tenía otra alternativa que utilizar el proceso de la corte", dijo Gould.

Whitaker, de 50 años, compró la casa de ladrillo de dos pisos cerca del Jardín Botánico, en Norfolk, Virginia para su madre en 1984, cuando todavía era un astro en el ring.

Desde sus días de gloria, Whitaker ha estado entrenando boxeadores jóvenes, pero “el trabajo se está acabando poco a poco”, según Gould.

"Él está limitado a lo que él puede hacer formando otros boxeadores", dijo Gould. "Han disminuido significativamente en los últimos años y no es capaz de mantener esta casa de $400 mil para su madre y sus hermanos”.

La casa siempre estuvo a nombre de Whitaker y, ya que no había contrato de arrendamiento o escritura de donación por escrito, la promesa oral del hijo a su madre no es ejecutable bajo la ley de Virginia, dijo Gould.

Ayer, un juez del Tribunal de Distrito de Norfolk se pronunció a favor de Whitaker, ordenando a Novella Whitaker y a otros dos hijos y sus familias que también viven en el hogar a salir de la casa antes del 31 de marzo.

Whitaker ahora tiene la intención de vender la casa para retener $150 mil de la equidad del hogar y recuperar $18 mil en impuestos atrasados que pagó en el edificio, a nombre de su madre y sus dos hermanos, dijo su abogado.

"Él no estaba feliz de ir a la corte", dijo Gould. "Pero ahora tiene dos hipotecas sobre la casa y lo que iba a pasar era que si no se vendía, iba a haber una ejecución hipotecaria por parte del banco."

Una vez fuera de la corte, Whitaker apareció feliz ante las cámaras de televisión indicando que la sentencia era “un momento hermoso”, según ABC News.

Por su parte, su madre dijo tener el corazón roto por la decisión.

"Voy a sobrevivir... Soy una sobreviviente. Me iré con mi hija”, dijo Novella Whitaker a WVEC.

"Siempre será su hijo hasta que la muerte los separe, pero él está poniendo esta barrera en la familia", dijo la hermana mayor de Whitaker, Zelda Brown.

Un nieto de la señora Whitaker, el ex jugador de la NFL Ronyell Whitaker, también se ha presentado para ofrecer su ayuda a su abuela y asegurarse de que esté bien.