Un día después de que Puerto Rico viviera un momento de alegría por uno de sus boxeadores, ha llegado un momento de tristeza. Ha muerto el exboxeador boricua Carlos Ortiz, quien al igual que Miguel Cotto –quien fue exaltado al Salón de la Fama el domingo—es un inmortal de boxeo consagrado en el recinto internacional en Canastota, Nueva York.

La noticia la ha hecho pública en redes sociales uno de los electores del Salón de la Fama, Rick Glaser.

Ortiz tenía 85 años. Residía en Nueva York, donde vivió la mayoría de su vida luego de emigrar hacia esa ciudad siendo un niño junto a sus padres. Al momento no se han ofrecido detalles sobre la causa de muerte.

“El gran Carlos Ortiz ha fallecido”, escribió Glaser en su cuenta de Twitter, recordando que el expeleador fue tres veces campeón en dos divisiones, la junior ligera y ligera. “Fue uno de los más grandes peleadores de todos los tiempos de Puerto Rico”.

Ortiz en verdad lo fue. Según comparte con Primera Hora el periodista José Sánchez Fournier, Ortiz fue un destacado peleador que logró varios hechos históricos para el boxeo boricua. Fue el primer campeón mundial en dos divisiones y el primero en coronarse en una segunda división bajando de peso.

“Para el tiempo en los que él fue campeón solo existía un campeón por cada peso. Y solo habían nueve divisiones. Él fue primero campeón en la junior ligero y luego bajó de peso para ser campeón en la división ligera. Ahí se mantuvo como campeón por casi nueva años y se ganó la consideración de muchos expertos como uno de los mejores ligeros de todos los tiempos junto a Roberto ‘Manos de Piedra” Durán y Julio César Chávez.

En esta otra foto aparece Carlos Ortiz junto a Alex 'El Nene' Sánchez, Macho Camacho, Samuel Serrano y Angel 'La Avispa' Chacon en un junte de exampeones boricuas realizado en el 2009.
En esta otra foto aparece Carlos Ortiz junto a Alex 'El Nene' Sánchez, Macho Camacho, Samuel Serrano y Angel 'La Avispa' Chacon en un junte de exampeones boricuas realizado en el 2009. (Christopher Gregory)

Durante una carrera de 17 años empleada entre el 1955 y 1973, Ortiz acumuló una marca de 61-7-1 con 30 KO. Ganó su primer título en el 1959 al derrotar a Kenny Lane por vía de nocaut en el segundo asalto de un combate celebrado en el Madison Square Garden. Perdió esa corona en el 1961 en la segunda de tres peleas que tuvo ante el italiano Duilio Loi. Su segundo corona, en el peso ligero, la ganó en Las Vegas en el 1962 al superar a Joe Brown. Luego en el 1965 perdió la misma ante Ismael Laguna en Panamá pero la recuperó meses después en el Estadio Hiram Bithorn de Puerto Rico.

Francisco ‘Paquito’ Valcárcel, presidente de la Organización Mundial de Boxeo, afirmó haber recibido información sobre el deceso del peleador nacido en Ponce el 9 de septiembre del 1936.

“Sé que últimamente no estaba bien de salud”, lamentó Valcárcel, quien acto seguido constató que Ortiz es uno de los cinco o seis más grandes campeones de Puerto Rico en la historia.

“Es así primero por el tiempo en el que peleaba. No era fácil hacerse campeón en aquellos años. Existían menos organismos. Y él fue un campeón dominante. Al público le gustaba verlo pelear. Lo tenía todo... boxeaba, tenía una pegada respetable, y era atractivo para el público. Y todo eso en tiempos que la situación para los boricuas no era fácil en Nueva York”.

Fournier destacó, de hecho, que Ortiz vino a ser el primer campeón boricua desarrollado en la diáspora.