El periodo de descanso será breve para Félix ‘Diamante’ Verdejo. El púgil disfrutará de un respiro junto a su familia durante las próximas semanas antes de regresar a Las Vegas, Nevada, para retomar las rutinas de entrenamiento bajo la tutela de Ismael Salas.

Verdejo tiene como objetivo estar nuevamente dentro del ensogado para septiembre u octubre próximo.

“El próximo lunes comienzo nuevamente con las carreras matutinas y en dos o tres semanas como máximo, vuelo a Las Vegas para reincorporarme a la preparación”, sostuvo.

Verdejo no desea desperdiciar el impulso que lleva luego de vencer a Will Madera por nocaut técnico en el primer asalto el pasado 16 de julio.

“Me siento como en el 2015 cuando iba a pelear por el título mundial, pero por los tropiezos y las malas decisiones que tomé no se dio esa oportunidad. Pero ahora estoy a ley de una o dos peleas más para enfrentar a cualquier campeón o disputar un título vacante”, aseguró.

Esa confianza que destila se la debe a la disciplina y madurez que ha obtenido desde que está con Salas.

“Obviamente el cambio ha sido del cielo a la tierra. El empeño que le he puesto en el gimnasio ha sido clave para mejorar rápido. Los cambios han sido drásticos y lo he notado por cómo me salen los golpes. Estoy fallando muchos menos que antes. El jab es potente y rápido. Mientras la mayoría de los peleadores lo usan para marcar para luego entrar en las combinaciones, lo tiro para dar seco. Mi jab es letal, lo siento cuando lo doy. A Madera lo lastimé con un jab y me di cuenta porque los ojos se le pusieron rojos enseguida”, explicó.

Después de vencer a madera, Verdejo insistió que estaría disponible para el ganador del enfrentamiento entre Vasyl Lomanchencko y Teófimo López que será en el otoño.

“En las condiciones óptimas que estoy, ahora mismo ninguno en las 135 libras me va a ganar”, concluyó.