McWilliams Arroyo nunca dudó que una pelea contra el mexicano Julio César Martínez para disputar el cinturón mosca (112 libras) del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) se iba a dar.

Solamente debía esperar pacientemente. Después de varios atrasos por distintos contratiempos, el dúo finalmente estará cara a cara dentro de un ring el 19 de noviembre, 16 meses después de la fecha original, y Arroyo adelantó que se dirige al pleito con la intención de ser declarado el campeón en propiedad.

El pasado febrero, el púgil puertorriqueño superó a Abraham Rodríguez por nocaut técnico en el quinto asalto para agenciarse la versión interina de dicha corona. De hecho, Rodríguez fue un sustituto de último momento cuando Martínez informó que sufría de una lesión en una mano.

“Esta peleó debió darse en agosto de 2020. No se dio. Entiendo que después de esta pelea, habrá un solo campeón que es lo que el público se merece”, sostuvo Arroyo (21-4, 16 KO). “Pienso que Martínez entendía que estaba en desventaja peleando conmigo y, tal vez, estaba esperando que me pusiera viejo. Son estrategias, pero estaré listo”.

“Las veces que no ocurrió la pelea fueron por decisiones de Martínez y su salud. Todas las veces que íbamos a pelear estuve dispuesto y listo. Llevo esperando desde agosto del año pasado y el mejor de los dos ganará. Iré en las mejores condiciones”, agregó.

Martínez regresó al ring el pasado junio. Detuvo su rival Joel Córdova en el sexto asalto durante una cartelera en Guadalajara, México. Arroyo dijo que, mientras tanto, se mantuvo entrenando en la eventualidad de que apareciera un espacio en un evento.

“La presión la tiene él (Martínez) debido a que no ha peleado contra el retador obligatorio. La gente le está reclamando eso y Martínez está alardeando para llamar la atención. Haré mi trabajo. Siempre he estado entrenando, guanteando porque nos dijeron que iba a pelear en una fecha defendiendo el interino, pero después apareció que iba a pelear contra Martínez”, afirmó Arroyo.

El combate formará parte de una cartelera que tendrá como escenario el SNHU Arena en Manchester, New Hampshire, que incluirá cuatro combates titulares encabezadas por el pleito del peso semicompleto entre Demetrius Andrade y Jay Quigley.