Las Vegas, Nevada.  Con la frente en alto, Orlando “el Fenómeno” Cruz aceptó su derrota ante Orlando Salido el pasado sábado y, por lo pronto, tomará unas vacaciones antes de considerar el camino que seguirá en el boxeo rentado.

Asimismo, adelantó que no considerará el retiro y que contempla la posibilidad de descender a las 122 libras.    

“Estaré un tiempo en Puerto Rico y luego iré a Nueva York para realizar unos trabajos y unos planes”, dijo Cruz a Primera Hora poco después del evento.

“(El retiro) no está en mis planes. Lo que deseo ahora es descansar. Fueron seis meses intensos de mucho entrenamiento y quiero descansar por uno o dos meses, pero manteniéndome y no descuidarme. Estamos hablando de la posibilidad de bajar a las 122 libras debido a que el día del pesaje me levanté en 124 libras y a lo mejor pueda hacer las 122”, continuó diciendo.

El mexicano Salido tronchó el sueño del puertorriqueño de coronarse campeón mundial cuando obtuvo una victoria por nocaut en el minuto 1:05 del séptimo asalto. De esa manera, Salido recuperó la faja pluma (126 libras) de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) que perdió el pasado enero a manos del también mexicano Mikey García.

“Fue una buena pelea, me mantuve pelando siempre. Del asalto uno al cinco, me dio buenos golpes, pero nunca me hicieron daño, nunca me afectó. Como en el cuarto, me dio un gancho y me dije ‘wow’ estoy bien entrenado porque no me hizo nada y Salido se dio cuenta. Él estuvo trabajando los golpes bajos y me estuve moviendo, pero me cogió con un buen golpe. Le pasa a cualquiera”, relató Cruz.

En el séptimo asalto, Cruz intercambió golpes con Salido y pagó el precio cuando recibió una combinación que llevó al puertorriqueño a la lona. El referí Kenny Bayles comenzó el conteo de 10 y Cruz nunca se levantó. El propio peleador aceptó que se alejó del plan táctico de la pelea.

“Fue un error pararme a pelear porque no entrené para eso, pero también quería demostrar que podría hacerlo y no siempre estar boxeando. Así es el deporte. Contento por la oportunidad de haber peleado por un título mundial, algo que no todo el mundo hace y agradecido”, dijo.

“Me lastimó bien la quijada y sentí que si me levantaba iba a coger otro golpe innecesario. Estaba un poco mareado. Son cosas que pasan, batallé y traté de llevarme el título, pero vendrán tiempos mejores”, concluyó Cruz.

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