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Las Vegas.- La hora de la verdad llego de nuevo para el púgil filipino Manny Pacquiao que volverá a tener enfrente a un gran rival como es el puertorriqueño Miguel Cotto, actual campeón del peso welter, versión Organización Mundial de Boxeo (OMB). Pacquiao ha hecho ya historia dentro del mundo del boxeo tiene títulos mundiales en seis categorías diferentes de peso y si logra la victoria mañana, sábado, ante Cotto, que expone su corona, sería la séptima. Nada de eso le preocupa a Pacquiao porque después que concluya la pelea tendrá otro compromiso, pero éste será de escape de diversión, como es asistir a un concierto en el que toca la banda a la que pertenece. Muchos creen que Cotto será el rival más difícil que debe enfrentar Pacquiao, que además sube de peso y será una incógnita como va a responder ante un púgil muy completo y con experiencia. Esa responsabilidad está asumida por Pacquiao, pero no le quita ni el sueño ni de hacer el resto de las actividades con las que siempre está ocupado. Su entrenador, Freddie Roach, preferiría que se concentre únicamente en el combate, pero sabe que el filipino no puede estar inactivo dentro o fuera del cuadrilátero. "Por supuesto que me opongo al concierto", comentó Roach. "Pero él hace muchas cosas. Siempre está haciendo algo y no seré yo quien se lo impida". Eso incluye desde ayudar a las víctimas de un reciente tifón en las Filipinas hasta protagonizar una película de acción llamada "Wapakman". Pacquiao, padre de cuatro hijos tiene tantas actividades con las que cumplir que hasta sus asesores pueden perder la cuenta a la hora de organizarlas. Pero nada de esto importa si el sábado no consigue otro triunfo para asegurar su legado como uno de los mejores púgiles en la historia y el primero que se corona en siete pesos distintos. "Para mi el boxeo es una forma de entretenimiento", declaró Pacquiao a los periodistas en la rueda de prensa oficial previa a la pelea. "Hay que entretener a la gente. Hay que ganarse su confianza, ser honesto con todo lo que haces". Pacquiao, con marca de 54-3-2, 37 triunfos por nocáuts, ha hecho precisamente eso en sus dos últimos combates, en los que destrozó al mexicoamericano Oscar de la Hoya, que tuvo que tirar la toalla, y dejo nocáut de forma fulminante al inglés Ricky Hatton con un solo golpe. Una victoria de Pacquiao, que además se lleva 13 millones de dólares de bolsa, posiblemente dejaría el camino despejado para el gran duelo con el estadounidense Floyd Mayweather Jr. en la que sería una de las peleas más anticipadas en la historia. Pero antes el campeón filipino tiene que enfrentarse con un boxeador que apenas perdió una vez en su carrera, que es un peso welter natural y que posee una devastadora pegada capaz de derribar a cualquiera. "Esta es la pelea más importante en mi vida. Ganar siete títulos significa que en 20 ó 30 años la gente no olvidará mi nombre. Manny Pacquiao seguirá vigente", destacó el campeón filipino, verdugo de todos los púgiles latinos y en especial de los mexicanos. El combate posee todos los ingredientes para ser entretenido porque Pacquiao jamás deja de atacar, mientras que a Cotto le encanta agobiar a sus oponentes con golpes desde todos los ángulos. Además, queda la duda sobre la quijada de Pacquiao ante un rival más grande, y de cuánto se recuperó Cotto de la paliza que le propinó el mexicano Antonio Margarito el año pasado, con polémica posterior incluida ante la substancia prohibida que utilizó su rival en los guantes. Las apuestas favorecen a Pacquiao, en gran parte por el desempeño en sus dos últimos combates y porque ha logrado lo más difícil en el boxeo: subir de peso con la misma velocidad y aumentando el poder de su pegada. "Creemos que tenemos una ventaja en velocidad y también en poder", señaló Pacquiao. "Mi velocidad sigue ahí, y si tienes velocidad puedes generar poder, es así de fácil, no hay secretos en el deporte del boxeo". Tampoco esconde su estrategia de cara a la pelea y que no será otra que atacar mucho y temprano, y no dejar que Cotto se sienta con confianza y seguro. "Si lo dejamos ganar los primeros asaltos va a creer que puede pelear con Manny", comentó Roach. "Mi labor es no dejar que eso suceda". Cotto tuvo dificultades para ganar su más reciente pelea disputada el pasado 13 de junio en el Madison Square Garden, una decisión dividida ante Joshua Clottey en la que peleó casi todo el combate con una cortada grande sobre un ojo. Roach cree que Cotto no es el mismo desde la derrota contra Margarito y que ha perdido velocidad, una interrogante que quedará despejada cuando tenga que hacer frente al "tifón" Pacquiao, que además de ganar tendrá prisa por acudir al concierto con su banda.

