El dos veces campeón mundial José “Sniper” Pedraza exhibirá más volumen en el físico cuando enfrente al mexicano Inés Antonio Lozada el próximo 25 de mayo en el Osceola Heritage Park en Kissimmee, Florida.

Luis Espada, padre y entrenador de Pedraza, reveló que se deberá a un cambio de estrategia motivado por la necesidad de lidiar con oponentes de mayor fortaleza dentro de la división ligera (135 libras).

“Una de las cosas que aprendimos de la pelea contra Vasyl Lomachenko es que José no subió suficiente de peso. Se mantuvo entre 146 y 147 libras, pero para Lozada la meta es que Pedraza alcance las 150 libras”, explicó Espada.

“Eso le ayudará a mantener las energías durante la pelea aparte de que el cuerpo de Pedraza se está transformando. Esas libras para el día de la pelea serán ideales”, agregó.

Pedraza se encuentra a un mes para regresar al ring por primera vez desde el pasado diciembre cuando perdió ante Lomachenko el pasado diciembre. Durante las pasadas semanas, el cidreño está poniendo atención especial a las sesiones de guanteo.

“En lugar de trabajar con profesionales, está guanteando con aficionados porque lo hacen trabajar más. Esos muchachos están acostumbrados a tirar un mayor volumen de golpes y hace que Pedraza trabaje más”, explicó Espada.

El entrenador, por otro lado, confía que una victoria ante Lozada sea el pie forzado para nuevamente disputar un cetro mundial en las 135 libras.

“Para eso estaremos trabajar tal vez para el fin del 2019. Es posible que Mikey García deje vacante el título (del Consejo Mundial de Boxeo). Ahora bien, una pelea contra Teófimo López la aceptamos, aunque no haya un título mundial en disputa si el dinero es bueno”, afirmó Espada.