La Federación Puertorriqueña de Fútbol (FPF) responderá en su debido momento los reclamos que los directivos de la Puerto Rico Soccer League establecen en una demanda que está en vías de ser radicada en el Tribunal Federal Distrito de San Juan por, presuntamente, interferir indebidamente en las aspiraciones para llevar a cabo un nuevo torneo de la liga profesional.

Iván Rivera, actual presidente de la FPF, sostuvo que las protestas de la Puerto Rico Soccer League no son un tema nuevo y, a su vez, negó que haya actuado contrario a las normas de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA) y de la Confederación de Centro, Suramérica y Asociación Caribeña de Fútbol (Concacaf, por sus siglas en inglés).

Incluso, destacó que está inmerso en darle forma a los futuros planes de la Federación.

“Honestamente, siempre hemos seguido las normas y los estatutos de Concacaf y FIFA. Estoy concentrado en desarrollar el fútbol en el país”, reaccionó Rivera, quien confirmó que ha recibido comunicaciones por parte de la Puerto Rico Soccer League.

“Llevan enviando cartas desde octubre. Seguimos las normas y de ahí no nos hemos salido. Ni siquiera conozco a Serralta. Si lo veo, no sé quién es. Pueden tener sus opiniones, pero haremos las cosas por las normas desarrollando el deporte. Estoy desarrollando los proyectos, cambiando los planes por el coronavirus. En eso está nuestro centrados nuestros esfuerzos”, afirmó Rivera.

La demanda de la Puerto Rico Soccer League no ha sido radicada aún debido a las limitadas labores que se pueden realizar en el Tribunal Federal por la pandemia del virus COVID-19 y, a su vez, los contratiempos que surgen para realizar el debido emplazamiento. No obstante, Joey Serralta, principal ejecutivo de la Puerto Rico Soccer League y exintegrante de la Selección Nacional masculina de fútbol, adelantó que, a su juicio, algunas decisiones de Rivera han perjudicado los planes para reencaminar la liga.

“En septiembre de 2019, cuando íbamos a arrancar la temporada, la Federación manda a pedir una misiva a la FIFA diciendo que la liga no puede jugar porque no está afiliada. Además, amedrentaron a los jugadores usando la misiva de que la liga no estaba afiliada y si jugaban le podía costar las oportunidades de hacer el Equipo Nacional. Es un abuso de poder y no más”, recalcó Serralta.