El trabajo de David Villa es meter goles para España. El de Iker Casillas es atajarlos.

Pero las hazañas de uno no servirían de nada sin la efectividad del otro. Así que los dos son figuras importantísimas para que España se haya colocado entre los mejores cuatro equipos del mundo y aspirar a levantar la Copa el próximo 11 de julio.

Casillas se convirtió en “el salvador” de España en el partido de cuartos de final ante Paraguay al atajar un penal de Oscar Cardozo que pudo haber sido el entierro de las esperanzas de la “Roja”.

Desde ya, en España reclaman el regreso de “San Iker”, como le llaman en su club, el Real Madrid.

“Los penales tienen mucho de intuición y tener la fortuna en el momento clave. Antes del partido, Pepe (José Reina, uno de sus suplentes) me había comentado un penal que le tiró Cardozo a su lado izquierdo en un juego de la Copa UEFA. Gracias a su ayuda lo pude parar”, manifestó Casillas, quien se convirtió en el primer guardameta en atajar dos penales en dos Copas Mundiales distintas.

Ya Casillas había malogrado un penal de Irlanda en el Mundial de Japón-Corea 2002 en octavos de final. De hecho, según informó la FIFA, éste es el Mundial en que más penales se han fallado en tiempo de juego, con seis. El partido entre Paraguay y España es el segundo en la historia de los Mundiales en que se fallan dos penales. El primero fue hace 80 años, cuando en 1930, sucedió lo mismo en un partido entre Argentina y México.

Villa, El matador

Pero si hay alguien que se ha ganado todos los elogios de “la Roja” ése es David Villa.

El nuevo delantero del Barcelona es, hasta ahora, el máximo goleador del Mundial con cinco tantos en cuatro partidos. Pero mejor aún, la mayoría han sido en momentos determinantes para asegurarle el triunfo a España.

“Estoy contento de mí y de mis cinco goles, porque han sido decisivos. Hacer tres en un 7-0 no me habría interesado”, manifestó Villa, quien es el único jugador español en la historia en conseguir goles en cuatro partidos consecutivos en un Mundial.

“De todos modos estoy ayudando a España como ayudan los demás: sin las paradas espectaculares de (Iker) Casillas, mi gol con Paraguay habría valido poco. Si soy Balón de Oro, él lo es aún más”, añadió el jugador en conferencia de prensa.

La prensa internacional se ha volcado en elogios para con Villa, quien a pesar de deslumbrar en Sudáfrica, no es un desconocido del fútbol internacional.

De hecho, Villa, quien ya había escrito con letras mayúsculas su nombre en el Valencia español, ya lleva ocho goles en Mundiales y está a uno de empatar con Raúl como los máximos goleadores de la selección ibérica.

“Siempre he marcado mucho en la Liga, en la selección estoy con 43 goles, uno menos que Raúl, y he ganado la clasificación de los goleadores en el último europeo. Sin embargo, al menos fuera de España, parece que haya comenzado ahora”, apuntó.