Barcelona va a escoger un nuevo técnico en los próximos días y pudiera tener un nuevo presidente el año próximo.

El club está prometiendo cambios estructurales “amplios” y “profundos” luego de una de sus derrotas más humillantes — 8-2 ante Bayern Munich en cuartos de final de la Liga de Campeones el viernes.

La interrogante que queda es si el equipo podrá retener a Lionel Messi.

El mayor astro del equipo por más de una década tiene contrato con Barcelona hasta el 2021, pero no ha ocultado recientemente su insatisfacción con el club.

Messi ha sido especialmente franco esta temporada, hablando de los problemas y apuntando a las malas decisiones de los directores del club. Aunque nunca ha insinuado irse, sus acciones recientes han despertado dudas sobre su futuro.

“El fútbol es un deporte que llega y se va muy rápidamente de tu vida, así que los próximos dos años, en los que él seguirá teniendo el poder de influir partidos de la forma en que lo hace, ¿va a querer hacerlo sin competir realmente por títulos?. No lo sé”, dijo el ex jugador Rio Ferdinand.

La prensa española ha reportado que las negociaciones para extender el contrato de Messi más allá del próximo junio han estado congeladas desde que escalaron los problemas en el club. Un medio brasileño, Esporte Interativo, dijo que Messi quiere irse ahora en lugar de esperar para el próximo año.

Rumores de clubs queriendo contratar a Messi comenzaron a aflorar inmediatamente tras la derrota ante Bayern, con el Manchester City de Pep Guardiola presuntamente entre ellos.

Muchos piensan que la humillación ante Bayern pudiera haber sido el punto de inflexión para el astro argentino: Messi pareció haberse dado por vencido para la pausa, cuando las cámaras le mostraron en una esquina de la banca mirando al suelo y mordiéndose las uñas mientras esperaba para regresar a la cancha.

Messi y sus compañeros de equipo tuvieron que enfrentarse con furiosos hinchas del Barsa que los confrontaron y criticaron al equipo en el centro de entrenamientos del club luego de que los jugadores regresaron de Portugal.

Messi ha mantenido un inusual silencio desde la derrota en Lisboa y no ha hecho declaraciones públicas, a diferencia de cuando el equipo perdió el título de la Liga española con Real Madrid unas semanas antes y el argentino habló abiertamente con la prensa.

Esta campaña, Messi criticó a los directores de Barcelona por algunas de sus decisiones. Estaba especialmente molesto con Eric Abidal uego que este criticó los esfuerzos de los jugadores en medio de una serie de malos resultados. Abidal fue despedido el martes.

Messi había dicho además que no pensaba que Barcelona tendría éxito en la Liga de Campeones si las cosas seguían como estaban en el club.

El club enfrente además una difícil situación financiera cualquier debido a la pandemia de coronavirus, lo que pudiera dificultar las negociaciones con Messi. Aún así, el presidente de Barcelona Josep Bartomeu siempre ha dicho que espera que Messi concluya su carrera en el club y que Messi quiere lo mismo.

El resultado de las elecciones presidenciales del club casi seguramente tendrá un papel importante en la decisión de Messi y será importante también si se siente feliz con el trabajo del nuevo técnico.

Messi, de 33 años, está entre los jugadores más viejos en el equipo, junto con Gerard Piqué, Sergio Busquets, Ivan Rakitic, Arturo Vidal y Jordi Alba. Los jóvenes considerados futuras estrellas incluyen a Ansu Fati y Riqui Puig, aunque es demasiado pronto para saber si contribuirán al equipo grande en el futuro.

Luego que el club anuncio “profundos cambios en el primer equipo”, muchos se preguntan qué significa eso para Messi.