San Salvador. Cuatro días después de la tragedia provocada por una estampida de aficionados que dejó 12 muertos y más de 100 lesionados, las autoridades del fútbol salvadoreño acordaron el miércoles dar por finalizado el Campeonato Nacional.

La Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT) y la dirigencia de la Primera División del Futbol Profesional anunciaron la medida en un comunicado, emitido tras largas reuniones y “conversaciones reflexivas” sobre la tragedia, que sobrevino cuando una avalancha de hinchas derribaron uno de los portones del estadio Cuscatlán.

“Hemos determinado dar por finalizado el Campeonato Nacional 2022-2023 de El Salvador”, informaron los dos organismos deportivos. “Nuestra prioridad será la de asegurarnos que se refuercen las medidas de seguridad en los eventos de fútbol”.

Tanto el órgano rector del fútbol salvadoreño como la máxima categoría de este deporte en el país centroamericano afirmaron que buscarán el apoyo y la asesoría de la FIFA y la CONCACAF, para implementar mejores protocolos que garanticen la tranquilidad y seguridad de los aficionados.

Las organizaciones decidieron también que, ante la decisión de dejar inconclusa la campaña, los clasificados para los próximos certámenes de la CONCACAF serán FAS, como campeón del Torneo Apertura 2022; Jocoro, como subcampeón, y Club Deportivo Águila, el que más puntos acumuló en la temporada regular entre el Apertura y Clausura 2022-2023.

La FESFUT informó también que, en virtud de la decisión tomada de finalizar el Campeonato, “el equipo descendido deportivamente es A.D Chalatenango” y que por las circunstancias que llevaron a esta decisión, no habrá campeón del torneo Clausura 2022-2023.

Por su parte la Asociación de Futbolistas Profesionales de El Salvador (ASOFUTPROES), emitió un comunicado de prensa en el que lamenta la pérdida de las vidas de los aficionados en el Cuscatlán pero expresa su desacuerdo con la decisión de dar por finalizada la campaña del fútbol nacional.

“Lamentamos la decisión tomada por los miembros del Comité de Regularización (la FESFUT) y la Primera División de Fútbol, quienes continúan tomado decisiones sin tomar en cuenta los actores del fútbol que también tienen interés y se ven afectados por sus decisiones”, agregan.

Para buscar una solución que favorezca a todos los sectores del fútbol, los jugadores profesionales convocaron públicamente a una reunión de carácter urgente a los miembros del Comité de Regularización de la FESFUT.

La tragedia ocurrió el sábado por la noche, pocos minutos después de iniciado el partido de vuelta entre Alianza y FAS por los cuartos de final de la liga salvadoreña.

Según las autoridades y declaraciones de testigos, cientos de aficionados enfurecieron cuando no se le dejaba ingresar al inmueble a pesar de tener en sus manos los boletos. Luego, comenzaron a empujar hasta derribar un portón, causando la estampida.

La Fiscalía General de la República, investiga las posibles “conductas criminales” de los involucrados en la organización del partido, a fin de determinar qué grado de culpabilidad e intencionalidad puede existir sobre los hechos que causaron las lesiones.

Desde la misma noche del sábado la Fiscalía comenzó a entrevistar a los involucrados en los aspectos de seguridad del evento.

También investigan por qué los administradores del estadio sólo abrieron un portón de la zona sur y por qué lo cerraron cuando había cientos de aficionados tratando de ingresar. El sector general donde ocurrió la estampida estaba designado exclusivamente para los aficionados de Alianza, que era el local.

Ya la Comisión Disciplinaria de la FESFUT, sancionó al equipo Alianza que tendrá que jugar sus partidos como local a puerta cerrada durante un año y pagar una multa de 30,000 dólares.

La Comisión valoró la posible inhabilitación de los directivos y el gerente general de Alianza para ejercer cualquier actividad relacionada con el fútbol por un año. Sin embargo, esa sanción se descartó porque no fue apoyada por la mayoría de los miembros de la organización.

Detienen al presidente del club

De otra parte, la policía salvadoreña detuvo al presidente del equipo de fútbol Alianza y a otros directivos y empleados del estadio Cuscatlán, a quienes responsabilizan por una estampida de aficionados el fin de semana que dejó 12 muertos y más de 100 lesionados.

La Fiscalía de El Salvador informó el jueves en su cuenta de Twitter que además de Pedro Hernández, presidente del Alianza F.C., la policía también capturó a Edwin Abarca Ventura, gerente de seguridad Alianza F.C; Zoila Córdova, gerente financiera del equipo, además de a Reynaldo Avelar, gerente general de EDESSA, empresa dueña del estadio Cuscatlán, y a Samuel García Montano, encargado de las llaves del estadio.

Los detenidos serán presentados en los próximos días ante los tribunales de justicia para ser procesados penalmente por los delitos de homicidio culposo, lesiones culposas y estragos públicos.

La Fiscalía aseguró que los organizadores vendieron más boletos de manera ilegal. “Al agotar las entradas disponibles para el encuentro deportivo, decidieron comercializar ilegalmente boletos emitidos para encuentros anteriores”, señaló.

El director general de la Policía Nacional Civil, Mauricio Arriaza Chicas, dijo que además de investigar a la dirigencia del equipo —que era el local y responsable de la administración del partido—, también indagan a las barras.

Otras líneas de investigación es la presunta sobreventa de boletos y hasta la venta de alcohol fuera del estadio, añadió y mencionó había muchos aficionados visiblemente en estado de embriaguez.

Dijo que las autoridades buscan determinar por qué los administradores del estadio sólo abrieron un portón de la zona sur y por qué lo cerraron cuando había cientos de aficionados tratando de ingresar. El sector general donde ocurrió la estampida estaba designado exclusivamente para los aficionados de Alianza.

Fanáticos auxilian a personas durante una estampida en el Estadio Cuscatláán previo a un partido de la Liga Mayor, hoy en San Salvador (El Salvador). "El número de fallecidos tras la estampida en el Estadio Cuscatlán asciende a 9", indicó la fuente en Twitter y señaló dos personas en "condición crítica" se han trasladado a los hospitales cercanos. EFE/ Miguel Lemus
Fanáticos auxilian a personas durante una estampida en el Estadio Cuscatláán previo a un partido de la Liga Mayor, hoy en San Salvador (El Salvador). "El número de fallecidos tras la estampida en el Estadio Cuscatlán asciende a 9", indicó la fuente en Twitter y señaló dos personas en "condición crítica" se han trasladado a los hospitales cercanos. EFE/ Miguel Lemus (Agencia EFE)

Arriaza Chicas aseguró que el representa de la Policía desatacado en el sector general sugirió al responsable de la administración del evento que abrieran otra de las puertas, pero no aceptó.

El miércoles, la Federación Salvadoreña de Fútbol y la dirigencia de la Primera División del Fútbol Profesional anunciaron que ponían fin al Campeonato Nacional 2022-2023 tras la tragedia.

“Nuestra prioridad será la de asegurarnos que se refuercen las medidas de seguridad en los eventos de fútbol”, señalaron los organismos deportivos.