Primera victoria clásica para Manía A.
Manía A. es propiedad del Red Racing, del empresario Ray Delgado y entrenado por Juan Rivera.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 11 años.
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El dosañero nativo Manía A. obtuvo su primer triunfo importante y lo hizo en gran forma al dominar la edición 77 del clásico Navidad, efectuado a la altura de la séptima carrera de ayer en el hipódromo Camarero.
La prueba, la última de grado este año para nativos juveniles, presentó ocho corredores sobre distancia de 1,700 metros disputando la mejor parte del premio de $72,270. Los preferidos del evento fueron los ganadores clásicos Unificador y Relojero y el buen corredor Sr. De Los Cielos, que sobresalió como favorito.
Manía A., un hijo del semental Just Typical, criado en Haras Santa Isabel, se colocó tercero desde temprano mientras Unificador dominaba seguido por Caballo de Troya.
Cuando restaban 600 metros para el final, Jomar García, jinete de Manía A., inició su movida por tercera línea y a la altura del cuarto de milla final ya igualaba a Unificador, al que dominó entrando a la recta de llegada.
Ya en terreno derecho, García trabajó al máximo sobre Manía A. logrando que éste despegara dos cuerpos y medio al cruzar la meta victorioso con tiempo de 1:49.40 para el recorrido. Los fraccionales fueron :25.01, :49.60, 1:14.66 y 1:42.02.
Desde la segunda posición completaron el orden Caballo De Troya, Sr. De Los Cielos, Eddy Cotto, Unificador, Ernesto M. y Mi Tío Pello. Relojero no rindió carrera y el Jurado Hípico lo refirió al área de muestras para un examen completo “debido a su pobre demostración”, según señala el panel en su informe.
Manía A. es propiedad del Red Racing, del empresario Ray Delgado y entrenado por Juan Rivera. Obtuvo su tercera victoria en su cuarta salida. Terminó segundo en su debut el 25 de junio, luego recibió un descanso hasta reaparecer victorioso el 1ro de noviembre y 29 días más tarde ganó por segunda ocasión.
Su triunfo de ayer representa la primera en un evento clásico para el jinete Jomar García, quien ha aprovechado muy bien todas las buenas oportunidades que ha recibido desde que perdió el beneficio del descargue de siete libras cuando montaba como aprendiz.