Del Mar, California. Los entrenadores y jinetes de los rivales sabían que Knicks Go atacaría en cuanto saliera del arrancadero. Aun así, ningún otro caballo fue capaz de perseguirlo.

Knicks Go dominó el Clásico de la Copa de Criadores (Breeders’ Cup), dotado con una bolsa de seis millones de dólares, al cruzar la meta con una ventaja de dos cuerpos y medio el sábado en Del Mar.

El caballo corrió una milla y un cuarto en 1:59.57 minutos. Logró su cuarto triunfo consecutivo y, en el proceso, se consolidó como firme candidato para obtener el premio Eclipse como el Caballo del Año.

“La velocidad es muy peligrosa”, dijo el entrenador Brad Cox. “En cierto modo sentí que, si trataban de ir con él, podían poner en jaque su propia oportunidad de ganar la carrera”.

Montado por el dominicano Joel Rosario, el caballo cincoañero se llevó la mejor parte ante tres destacados ejemplares, dos años menores —Medina Spirit, el polémico ganador del Derby de Kentucky; Essential Quality, que conquistó Belmont, y Hot Rod Charlie, favorito de muchos espectadores locales dado que su dueño tiene vínculos con San Diego.

“Salió realmente bien”, dijo Rosario, quien obtuvo su 15to triunfo en una carrera de la Copa de Criadores. “Pareció que estaba disfrutando realmente lo que hacía. Pude ver sus orejas. Estaba muy relajado”.

Con pronósticos de 3-1 y ante 26,553 espectadores, Knicks Go pagó 8.40 dólares a primer lugar. Ganó el año pasado la carrera Dirt Mile.

Es el sexto caballo en la historia que ha ganado dos diferentes carreras de la Copa. Sus dueños son surcoreanos.

“Ésta se ubicaba muy alto en la lista de carreras que queríamos ganar, y la hemos conseguido”, dijo Cox, quien obtuvo su primer Clásico.

Cox participó también con Essential Quality, favorito por 9-5, que finalizó otro largo detrás, en el tercer sitio.

Medina Spirit no encontró el cierre adecuado para amenazar a Knicks Go y fue segundo. El potro entrenado por Bob Baffert dio positivo de drogas en una carrera posterior al Derby, y la Comisión Hípica de Kentucky no ha tomado todavía una decisión definitiva con base en su investigación.

“Estoy muy orgulloso de mi caballo. Hizo una gran carrera”, aseveró Baffert. “Para mí, es el mejor tresañero. Lo demostró hoy. En el hipismo las cosas se deben demostrar en la pista. Y hoy demostró que es de verdad”.

Baffert obtuvo permiso para inscribir caballos en el campeonato que pone fin a la temporada. Sin embargo se impusieron varias condiciones al entrenador que más dinero ha ganado en este evento.

Debió someter a sus caballos a pruebas más estrictas, y se reforzó la seguridad en su establo. Accedió a pagar por esa vigilancia adicional.

El viernes, ganó la carrera Juvenile, de 2 millones de dólares, con Corniche.