Adriana Díaz confesó que ha sido “difícil” enfrentar a lo mejor del mundo en la gira que lleva a cabo en China como parte de los eventos de la Federación Internacional de Tenis de Mesa.

Tras ver acción en los primeros dos eventos de calibre mundial, la puertorriqueña dijo que está enfrentando un nivel “retante”, pero, a la misma vez, siente “satisfacción” por su desempeño. Y añadió que también ha visto la “evolución” en su juego.

Díaz ha enfrentado a las jugadoras número 3 y 8 del mundo en juegos consecutivos y, al parecer, no tendrá respiro en el tercer y final evento que se jugará en la ciudad de Macao esta semana.

“Ha sido un poco difícil después de tantos años en otro nivel”, dijo la utuadeña, quien domina la zona americana e intenta tocar las puertas del Top 10, el cual es dominado por las jugadoras asiáticas.

“Hasta ahora siento que, en lo que cojo el ritmo, va a ser una buena experiencia para mi carrera. Lo tomo como un aprendizaje y estoy contenta con mis resultados”, agregó la jugadora a Primera Hora, tras pasar siete meses inactiva previo a la ’burbuja’.

Díaz tiene marca de 2-3, tras sus primeras dos competencias.

Las dos victorias fueron en el primer evento jugado en la ciudad de Weihai, la Copa del Mundo. Allí le ganó a la canadiense Mo Zhang y a la ucraniana Margaryta Pesotska. Mientras perdió ante la estadounidense Lily Zhang en la primera ronda y luego en los octavos de final ante la tercera mejor del mundo, la china Shingha Sun, en cinco sets.

De la Copa Mundial, Díaz se trasladó a la ciudad de Zhengzhou para debutar en la Gran Final de la ITTF. Y en su primer partido cayó en cinco parciales ante la octava mejor del mundo, la taiwanesa I-Ching Cheng.

No ha ganado ante las mejores 10 del mundo, pero sí ha luchado con ellas, sobre todo con Cheng, quien hace cinco años le dominó fácilmente en un encuentro del Campeonato Mundial del 2015 en China.

El juego ante Cheng le confirmó a la jugadora boricua que ha ido evolucionando hacia el Top 10 del mundo.

“Creo que sí, que ha habido evolución”, dijo. “En el 2015 yo tenía 14 años y no veía la luz ante Cheng; no sabía cómo le podía ganar. Esta vez estuve bastante cerca. He elevado mi nivel y espero acercarme un poco más”, dijo.

En el 2015, Díaz cayó 11-7, 11-5, 11-7 y 11-7 ante Cheng. Díaz estaba entonces clasificada número 170 del mundo. Cheng era la vigésimo tercera.

El viernes pasado, Díaz, ahora en la posición 19 en el ranking, cayó 11-9, 5-11, 10-12, 4-11 y 11-13 ante Cheng. El resultado fue el mismo, pero el margen fue distinto.

El nivel alto de las rivales no cambiará para Díaz en el siguiente evento, el World Table Tennis, que inicia el miércoles y en el que verán acción solamente 16 jugadoras. La Gran Final también fue un evento para solamente 16 jugadoras. Ahí vieron acción ocho de las mejores 10 del mundo.

Díaz espera aprovechar la oportunidad.

“Cada vez se va a poner más difícil. Será retante, pero a mí me gustan los retos. A la misma vez me hace sentir que estoy con las grandes. Ya me voy acostumbrando en comparación con el primer torneo. Voy a ir más relajada, más confiada. Me gustaría ganar dos o tres juegos para sentirme bien conmigo misma”, dijo.

El World Table Tenis tiene un formato distinto a los primeros dos eventos. En el primer día habrá una ronda de eliminación sencilla entre las jugadoras clasificadas del puesto 9 al 16, entre las que debe estar la utuadeña.